"Hey bro"

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Rompí muchas reglas.

Me pasé dos discos pare.

No paré en las luces rojas e incluso ocupé la vereda como camino, todo para llegar rápido al centro comercial, donde trabajaba el tal Michael, si no fuera por Raquelle aún estaría en mi casa llorando, ella al igual que yo queremos mucho a Selena, lo pude notar en su mirada, en cómo lloraba por ella como yo lo hacía.

No había estacionamiento, fue algo que no me importó pues dejé el auto en la entrada, en mi cabeza no cabía más idea que salvar, proteger y encontrar a Selena. Corrí por las escaleras, no tenía tiempo para el ascensor, mucho menos para el taco de las escaleras mecánicas, el décimo piso estaba muy lejos, pero llegué sin cansancio alguno, me precipité encima de toda la gente, podía oír algunos insultos y otros que me decían que estaba en un centro comercial no en las olimpiadas, boté un par de personas en el trayecto y no me detuve a pedir disculpas, no había tiempo para nada más, en mi mente habían miles de pensamientos ¿Estará bien?, ¿he llegado tarde?, ¿si no está que haré?.

Desde mi posición podía ver el mesón, rápidamente divisé a Michael y sin pensarlo dos veces corrí hacia donde estaba él.

-TU- Grité mientras me adelantaba al mesón.

-¿qué pasa?- dijo este mientras se volteaba, sus ojos se toparon con los míos y soltó una sonrisa arrogante- Ohh tú eres el novio de la chica guapa, ¿ya te dejo?- preguntó con ironía - porque yo estoy disponible- dijo mientras limpiaba una mugre imaginaria de su hombro.

No dejé que siguiera riéndose en mi cara, de un pequeño salto quedé sobre el mesón y con ambas manos tomé el cuello de su polera para elevarlo, saque fuerza de lo desconocido pero lo levanté casi dos metros del suelo para lanzarlo al otro lado del mesón.

-¡maldito! DONDE ESTA SELENA- grité cerca de su oído mientras salpicaba baba en este. Lo arrastré contra su voluntad hasta el subterráneo, donde se encontraban las bodegas, contenedores y herramientas, lo lancé lejos no sin antes propinarle un golpe en el medio del rostro dejando sus labios sangrando.

-PEDAZO DE IDIOTA- se puso de pie, pasó sus manos por su rostro, lamió sus labios y escupió sangre -¿QUÉ TE SUCEDE? AH,Ah , ¡DIME!- decía mientras se acercaba considerablemente a mi.

-¿QUÉ QUE ME SUCEDE?- lo alejé de mí con un empujón en su pecho - ¿DONDE CARAJOS TIENES A SELENA?, ¡RESPONDE MIERDA!- lo volví a empujar lanzándolo más lejos.

-¿Que? perdiste a tu muchacha, déjame decirte que a mí no se me escaparía una mujer, eres muy poco hombre- Apenas terminó de hablar mi puño tocó su rostro, su abdomen y su pecho, lo golpee como jamás había golpeado a alguien. Jamás había golpeado a alguien, al menos de que las luchas que jugaba con Tyler contarán de algo. Michael se puso de pie esquivó un golpe y me pateó la entrepierna, no sentía dolor más fuerte que el dolor de pensar que había perdido a Selena, sabía que estaba en peligro. Volvió a patearme para luego pegarme en el centro de mi pecho logrando que se me escapará todo el aire que tenía guardado, me voltee en busca de algo, necesitaba recuperar el aire, a mis espaldas veo una caja, la cual corro para lanzársela en el rostro, en esta solo había plástico, volvió a golpearme dejándome en el suelo. Con un pie lo zafe de mi agarre y ahora yo me encontraba sobre él, volví a golpearlo hasta que mis manos se encontraron en su cuello, la verdad no sabía qué haría, en mi mente ni una idea se paseaba, no había nada, no era consciente.

No media la fuerza que estaba utilizando contra él, me desconocía completamente. En un abrir y cerrar de ojos este se encontraba de un color morado.

-No..oooo pu....e..d.oooo.... re..ssss...p..iira...aaaarrr- Dijo en un hilo de voz, lo solté de improvisto, las lágrimas nublaban mi vista, observé mis manos, un ataque de rabia e irá era lo que tenía.

Me senté a un costado de él mientras esté tosía y respiraba bocanadas de aire para estabilizarse.

-Dimee.eee don...deeee ti..eeenessss a se...l..eeeenaaa- dije entre lágrimas y sollozos, mis manos golpeaban el suelo mientras mis lágrimas caían sobre mis mejillas sin permiso alguno, no existía vergüenza, todos podemos llorar y jamás pensé que algo tan lindo se podía esfumar tan fácilmente- Maldita sea Michael, dime dónde mierda esta Selena- decía mientras las lágrimas seguían bañando mi rostro - Noo le hagas nada por favorrrrrr, dime qué quieres.Te conseguiré todo lo que quieras pero no le hagas daño a Selena, prometo que no me vuelvo a acercar pero devuélvela por favorr- solo quería verla a ella, no quería que nada le sucediera yo estaba dispuesto a dejarla si de salvarla se tratara.

-Noo, no, Hey bro, estas equivocado, yo, yo no sabía que habías venido en busca de ella porque piensas que algo malo le hice - comenzó a sobar mi espalda y yo lo miré extrañado, esperaba otra respuesta, esperaba más golpes, solo deseaba que me golpeará y dejará inconsciente para despertar de este mal sueño y encontrarme con los ojos castaños de ella - lamentó si te di a entender eso, yo sólo encontré guapa a tu chica y decidí joderte, ¡pero yo no sé dónde está!, yo no haría eso, yo... Yo lo lamento, si en verdad necesitas algo, no dudes en contar conmigo, pero Auchh- dijo mientras tocaba su rostro- bien que pegas Ehh- dijo intentando hacerme reír y si logró que una sonrisa se me escapara- tienes que estar tranquilo, nada bueno conseguirás de la violencia al menos de que estés seguro que yo la tenía, claro está que no la tengo si no estaría con ella, ve a la policía- dijo con notoria obviedad.

-Ya hice eso- limpié mi nariz- deben esperar veinticuatro horas, no sé qué hacer, yo la necesito aquí conmigo... Debo irme- y sin dejar que me respondiera me puse de pie, caminé hacia la puerta, me voltee para verlo, aún estaba en su lugar observándome mientras sobaba su brazo.

-Gracias, y perdón- solo sonrió y me echó con la mano.

No me quedaría sin hacer nada mientras pasaban las veinticuatro horas, si nadie hacía nada, yo lo haría.

-Espero que saberme los capítulos de Csi:Miami de memoria sirva de algo- dije en voz alta mientras subía a mi auto.

Because I love YouDonde viven las historias. Descúbrelo ahora