Capitulo 46: Reconciliación

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POV CRISTIAN

Dos días después.

-Cristian- dice Ana. Sé que esto puede ser muy rápido y ella aun esta adolorida pero necesitaba esto. De hecho necesitabas esto. Después de haberla encontrado y estar aquí tanto tiempo cerca de ella, con su olor, su calor y su ser, necesitaba sentirla mía.

Es por este motivo que en la mañana cuando se levantó, me dijo solo que sentía malestar pero nada de dolor, así que se levantó para ir al baño y ducharse pero mi parte más caliente no pudo con la tentación y entre a verla.

Trague duro cuando la vi. Estaba más bella que nunca. El agua le daba un brillo único. Se estaba lavando el cabello y lo tenía a un lado dejando su espalda al descubierto. La curva de su trasero me llamaba a que la tocara. Me acerque a ella y antes de entrar a la duche me desvestí. Estaba en éxtasis y mi cuerpo lo demostraba. Mi pene estaba erecto y duro. Las venas se notaban.

Con cuidado había entrado para quedar ubicada detrás de ella. Mi mano derecho fue a dar a su cintura y la otra a la línea que divide su espalda. Ahí fue cuando comencé a recorrerla y ella me sintió. Salto de la impresión pero después se tranquilizó. Me acerque a ella quedando a penas a unos dos centímetros.

-Cristian- dice Ana cuando me siente por completo detrás de ella y ahí es cuando me doy cuenta que la hecho de menos, y no solo por la falta de compañía por 5 minutos sino que realmente la echo de menos en mi cama, desnuda, jadeando y gritando mi ...

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-Cristian- dice Ana cuando me siente por completo detrás de ella y ahí es cuando me doy cuenta que la hecho de menos, y no solo por la falta de compañía por 5 minutos sino que realmente la echo de menos en mi cama, desnuda, jadeando y gritando mi nombre.

-no me pude detener. Dios estas tan bella. El embarazo te está cambiando de una manera maravillosa. Sé que esto debería haberlo preguntado antes pero ¿puedo bañarme contigo?- le digo. Veo que sonríe.

-creo que lo preguntaste tarde pero para ahorrar un poco de agua, para mi está bien- dice. La giro para que quede en frente de mí.

-no puedo sacar mis manos de tu cuerpo. ¿Cómo mierda un embarazo puede poner a una mujer más bella que antes? Eres una diosa, una diosa de ojos azules- la beso. Desde que hemos estado aquí en la cabaña hemos hablado de todo y una de esas cosas es que nos queremos dar una oportunidad. Ella me dice es hora de dejar los malos recuerdos en el pasado y seguir para que a nuestro hijo no le afecte.

-me estás haciendo querer más- dice cuando termino el beso.

-¿más que?- le digo.

-no quiero besos solo en mis labios si no que por aquí también- me indica con su dedo el cuello, la separación de sus senos, su vientre hinchado y la mano desaparece en la unión de sus muslos.

-estas en modo seductor, señorita Stelle- queda a la altura de sus oídos y le digo- me encanta- muerdo su oído.

-no seas malo. Cuando haces eso, mis defensas bajan. Sabes que tienes poder sobre mí- dice mientras pone sus brazos alrededor de mi cuello. Me besa de una manera tierna y me gusta.

Es mi secretaria: Cristian y AnastasiaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora