Capitulo 44: Trampas

497 28 16
                                    


(9 de agosto)

(Pablo)

Miro a Juan moverse en la cocina de un lado a otro ocupándose de que todo esté en orden, es temprano todavía, no ha llegado nadie, aunque ni siquiera sé muy bien quienes son los demás invitados. Hay tantas cosas de su vida que me estoy perdiendo que siento que el verdadero invitado aquí soy yo y odio esa sensación.

He llegado de Tarragona en la tarde y aunque he intentado dormir me ha sido imposible, mi cuerpo se niega a obedecerme, las emociones a veces llegan a un nivel demasiado alto y mi mente no colabora. Ahora me siento cansado, demasiado cansado y con una sensación extraña en mi interior, pero sé que es normal en mí en ocasiones. No he visto a Paula todavía porque está preparándose en su habitación. Como un poco de lo que ya está preparado en la mesa y Juan me regaña, solo sonrío.

- Sube y apura a Paula.

No tiene que decírmelo dos veces, ya estoy de pie y saliendo cuando me detiene.

- Pablo, estoy diciendo que la apures y no que la entretengas más. ¿entendiste?

- Si señor, mensaje recibido.

Camino rápido, llevo demasiados días sin verla y la necesito, necesito su perfume, su calor cerca mío. Me cruzo con Martín que en la sala intenta buscar una música que le guste, solo me mira con una media sonrisa sin decir nada más.

Cuando llego arriba la puerta de su habitación está semi abierta, la observo frente al espejo, lleva un vestido en color bordo, zapatos de tacones altos y su cabello recogido. Parece concentrada en su imagen en el espejo y toca su pelo como intentando darle alguna forma que no alcanzo a entender, la música está lo suficientemente fuerte en la habitación como para que ella no advierta mi presencia. Me tomo unos segundos para calmar todo este torbellino de sensaciones que me ahogan cuando la veo y cuando la siento. Me acerco por detrás y se sorprende al ver mi reflejo en el espejo, la abrazo por la cintura y beso su cuello aspirando su perfume que tanta falta me ha hecho estos días, muevo mi cara por su piel haciendo que la barba le cause cosquillas, ella ríe acariciando mis manos en su cintura.

- Estás preciosa, sin importar cuanto te mires en el espejo.

- No creo que eso sea la verdad, no hay forma de arreglar el desastre.

La giro sin soltarla y la beso en los labios, ella me rodea con sus brazos y se entrega al beso sin decir nada más, sus labios suaves moviéndose sobre los míos, su sabor que logra embriagarme en segundos, respiro de sus labios sintiendo como la sangre aumenta su velocidad en mis venas, ella se aleja solo un poco sin dejar de abrazarme y sonríe. Sonríe y hace que por un momento todo desaparezca, todo sea fácil, solo seamos nosotros, sin nada mas de que preocuparse.

- Creo que voy a tener que pintarme de nuevo.

- Te lo volveré a quitar.

Vuelvo a besarla, esta vez con un beso más rápido.

- Feliz cumpleaños.

- Ya perdí la cuenta de cuantas veces me lo dijiste... como 20 mensajes, 10 llamadas...

- Es la primera vez personalmente.

- Si... y es mucho mejor.

- Te extrañé.

- Y yo a vos Pablo ¿Cuánto tenés libre?

- El martes viajo de nuevo.

TERRAL - Detrás de la música -Where stories live. Discover now