TERRAL - Detrás de la música -

Capitulo 28: Deseos incontrolables

(19 de junio)

(Paula)

Sentada en el comedor de los Moreno, investigo en YouTube todo lo que salió sobre las últimas presentaciones de Pablo en Barcelona, siento que el masoquismo cada vez se hace más parte de mi ¿Por qué me sigo haciendo esto? Siempre me gusta saber cómo está saliendo todo, es una forma de sentirlo más cerca. Pero esta vez lo que veo está lejos de dejarme tranquila, porque soy la mujer más estúpida del planeta con los celos más ilógicos. En Barcelona cantó con Zaz, verlos juntos me enoja y me frustra, tanta química y la confianza de ella con él arriba del escenario me hace pensar qué tanta confianza tendrán juntos abajo; y saber ahora, después de hablar con Pablo que además están comiendo juntos enciende en mi interior una llama de celos que no soy capaz de manejar; no tiene el más mínimo sentido y lo sé, inclusive una pequeña parte que todavía tiene un poco de conciencia me dice que no tengo ningún derecho, yo lo dejé hace más de un año y ahora no somos ni siquiera amigos aunque nos esforzamos en serlo. Quizás debería de llamarlo de nuevo y ver si sigue con ella, tentada de tomar el móvil presiono mi puño, no puedo hacerlo, suspiro profundamente y sonrío... Corazón 0 Razón 1... esto va mejorando.

En ese momento Casilda llega a la cocina, se sirve un vaso de jugo y como suele hacer siempre, se fija que estoy mirando, y luego recién se sienta frente a mí; no puedo evitar que aun sabiendo que ella está ahí, mis ojos sigan en la pantalla.

- ¿Cómo estuvo Barcelona?

- Parece que muy bien, ya hay muchos videos.

- ¿Finalmente cantó con Zaz?

Suspiro, no puedo evitarlo, trato de controlarlo, porque sé que para Casilda es demasiado fácil leerme.

- Si, se los ve bien juntos.

Ella sonríe sin dejar de mirarme.

- Lo sé... y se llevan muy bien, después de que grabaron juntos en Francia, Pablo no paró de hablar de ella. Es más grande que mi hermano, aunque no creo que la edad sea un problema.

- Yo... no me refería a ese sentido... pero bueno... da igual...

Casilda parece ignorarme y sigue con su verborragia mientras yo intento desesperadamente controlar mis emociones. Razón por favor no me abandones ahora.

- Si él es feliz yo apoyo lo que él decida, pero la verdad que me gustaría para él alguien que no sea de la música, se llevarían mejor.

Vuelvo a suspirar y siento la mirada de Casilda en mí, conociéndola sé que me está estudiando y quizás todo esto solo sea a propósito para medir mis reacciones. Y sé que mis expresiones, que rara vez puedo controlar, dicen mucho sobre lo que sus palabras me hacen sentir. Y me siento fatal, por supuesto que me siento fatal, me hace ver de cerca una realidad que insistentemente me niego a aceptar.

- De todas formas, tiene tiempo, aunque siempre me preocupa un poco el hecho de que no esté con nadie, solo en Madrid, tiene amigos, pero no es lo mismo... en fin. Solo quiero lo mejor para él.

Creo que a cada momento mi expresión se descompone un poco más, porque cada vez soy más consciente del inevitable hecho de que Pablo en algún momento esté con alguien, que se enamore, en una relación seria, que formalice, que algún día se case, que tenga hijos... un nudo cada vez más grande aparece en el centro de mi estómago. ¡Por Dios! ¡Tengo que tranquilizarme! ¡Me estoy adelantando! Claro que me estoy adelantando, quizás no suceda ya, pero en algún momento va a suceder. Si siguiera en Argentina sería más fácil, pero viviendo en Madrid tendré que verlo, quizás tenga que compartir con él y ella... pienso en un ella y mi piel se estremece, ya hablo como si fuera un hecho y solo hace que me confunda más. Siento como si empezara a hiperventilar y me sudan las manos... ¡Malditas emociones! Intentando normalizar mi respiración lo acepto... Razón 1 Corazón 1... y ya me da miedo cual será el desempate.