xxxvi. SORPRENDER.

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RUDE

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RUDE.
( LIBRO DOS. )

— Y... Esta es mi casa — dice Jade dejando pasar a Harry para luego cerrar la puerta detrás de ella. El rizado ríe mirando a su alrededor, ella frunce el ceño. — ¿Qué?

La mira. — Es que, se que esta es tu casa, no debes decírmelo, he venido miles de veces a... — Jade lo interrumpe con un ligero sonrojo acercándose a él para luego pegarle amistosamente en el brazo. — ¡Hey! — comienza a reír abrazándola, esta se aferró a él poniendo su cabeza en su pecho.

— Me gusta tu risa — Harry acarició su cabello luego de plantar un beso en él. — Es rara y contagiosa pero es linda — alza su cabeza para mirarlo sonriente, este alza una ceja.

— Pues a mí me gusta todo de ti, sin excepción — susurra para luego estirar sus labios y besarla lentamente.

— No dirás eso cuando veas la cochera — apareció Niall bajando las escaleras con varias películas en sus manos, fue hasta el televisor y dejo todo lo que llevaba en manos a un lado del sofá, tomó una y la puso. — Ustedes solo ignoren que estoy aquí, solo veré con calma mi serie para terminar la temporada cuatro que alguien terminó de ver sin mi — dice para luego tirarse al sofá y comer unas papas fritas que había traído también.

Harry la voltea a ver con el ceño fruncido. — ¿En la cochera? Pensé que no tenías auto — Jade le sonríe con nervios.

De un momento a otro, ya se encontraban en la puerta de la cochera con Jade abriéndola sintiendo sus manos temblar, ya que no sabía cómo sería la reacción del chico al ver lo que tenía ahí dentro. Al contrario Harry, permanecía serio esperando no ver lo que tenía en mente.

Cuando la castaña pudo quitarle el seguro a la puerta, antes de abrirla volteó para verlo, chocando con su pecho haciendo que se pusiera más nerviosa. — Solo... — lo miró a los ojos encontrándose con su mirada seria. — No entres en pánico, ¿sí? — suspiró para luego darse la vuelta y pasar. Notó que él no decía nada, por lo que pasó su vista del vehículo hasta el rizado, quien se encontraba balbuceando en susurro, esta arrugó la nariz al ver que no decía nada, cuando Harry por fin abrió la boca, aparentemente iba a gritar, alarmando a la chica. — ¡No entres en pánico! — exclamo ella antes de que un grito se escapara de su boca, este permaneció perplejo.

Luego de unos segundos habló. — No, no hay pánico, ¿por qué habría pánico? Solo tienes una motocicleta y según he oído de las más rápidas en el mundo, haciendo que sea una de las más peligrosas del mundo, no Jade, no hay pánico — su voz temblaba a más no poder haciendo que Jade comenzara a jugar con sus dedos sintiendo como Harry iba al vehículo y lo tocaba, para comprobar si no estaba soñando y que su pequeña Jade no tuviera una de las cosas que a ella más les aterraba antes. — Jade... ¿Cómo, cuándo, por qué? — preguntaba histérico.

— Pues, yo estaba aburrida y hace unos días había sido la boda de mamá y Greg, veía uno de mis programas favoritos, Los Restauradores. Ahí iban a arreglar una motocicleta y comenzaron a hablar de ellas. Ese día había tropezado con Luke Hemmings — el rizado no pudo evitar que los celos lo invadieran, son muy buenos amigos, muy cercanos, pero él es un experto quitando novias. — Él me invitó a comer un helado y yo acepté, me habló de todas esas cosas que él hace en las carreras ilegales y eso me intrigó más, por eso yo... — su tono de voz se apagó haciendo que el corazón de Harry se acelerara.

— No me digas que fuiste con él.

Ella lo mira cortamente, tímida. — he ido unas cuatro veces, el año pasado solo fui dos y este igual, la última vez que fui fue hace unas semanas, pero eso era antes, no planeo volver a ir allá — Harry sorprendido, buscó un lugar donde sentarse para luego tomar su cabello y jalarlo hacia atrás. — Fue unos meses luego de que te fuiste y yo me sentía muy sola, de alguna manera sentí que Luke me acompañó, aún más que Liam — se sintió culpable al ver como Harry se cubría su rostro con sus manos.

— ¿Tú madre aprueba esto?

— No quiso darme el dinero, Luke me consiguió un trabajo en un restaurante de comida rápida con él y así fui ahorrando — dice inaudible. — Lo siento — susurra.

— No — la mira, sus ojos estaban brillantes. — Yo lo siento, si yo no te hubiera dejado, nada de esto hubiera pasado, Jade — le hizo señas para que se sentara junto a él y lo abrazara, esta al instante obedeció. — Pero es que... — dice cuando ella esta abrazada a él. — Es una motocicleta, no puedo creerlo aún — ella ríe poniendo su cabeza debajo de la de él.

— Puedo enseñarte a manejarla si quieres.

— ¿Qué? ¡Esas cosas me aterran! Ni se te ocurra acercarme a eso — Jade comenzó a reír contagiando a Harry, en la habitación solo se escuchaban sus risas.

Greg miró a su hijo luego de cerrar la puerta con cuidado y ellos no se dieran cuenta. — ¿Él es el chico que Norma odia? — el rubio asiente. — No se ve mal chico.

— No lo es, Norma cree lo que no es cierto — dice él mientras caminaba de nuevo al sofá, su padre lo siguió y se sentó a su lado. — Puedo contarte si quieres — el hombre asintió. — Bien, pero no le cuentes nada a Norma, puede ahorcarte por creer la mentira que ella cree — ambos ríen.

Rude ⋆ Jarry (2)Where stories live. Discover now