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El celular de Ruth comenzó a sonar y ella lo tomó con rapidez.
-¿Quién habla?-preguntó rápidamente.
-Soy yo, mamá. -dijo William.- ¿Está Elizabeth?

-Te tomaste tu tiempo para volver a llamarla.-dijo la mujer molesta.- Tres meses.
-La llamamos todos los días pero no atiende.- se defendió él, de mala gana.
-Y algo habrán hecho. Quiero que me digas que le hiciste a mi sobrina.
-¿De qué hablas...?
-Mierda.-mascullo la mujer.- Pock, ¿Por qué tardaste tanto?
-No soy una niñera. -dijo el chico fastidiado.- Si la traigo cada noche es porque es mi amiga. Además yo no soy el que no sabe mantener a su sobrina en casa.
-¿Quién es ese imbécil? -preguntó William, con los puños apretados. No iba a permitir que le hablaran a su madre de ese modo.
-El que se encarga de cuidar a tu prima, algo que vos no pudiste hacer.- dijo la mujer y él se quedó estupefacto por el modo en que ella le había dicho esas palabras, como reprochándole y despreciándolo a la vez.
La llamada se cortó y William suspiró frustrado. Debía ir a buscarla. No perdió un minuto mas y tomó lo necesario antes de partir.
-¿A dónde vas?-preguntó Toby, al verlo pasar.
-A buscar a mi prima.
Rápidamente Andy apareció a su lado, listo para acompañarlo.
Los tres chicos salieron de la casa sin perder un solo minuto. Volvieron a llamarla pero nada resultó.
Un mensaje le llegó a William.
Pock, se fue a la cabaña. -Ruth.
William miró por la ventana del avión preguntándose a qué se refería su madre cuando le preguntaba que habían hecho con ella.
Por su parte, Andy moría de nervios, no sabía con que iba a encontrarse. Ella no le había respondido al teléfono ni a los mensajes y no podía mas que temer a que ella se haya ido para alejarse de él.
Llegarían a las diez de la mañana e irían directo a la cabaña donde, seguramente, ella seguía. Esta era la que estaba en aquel lugar donde la habían conocido. William estaba seguro de ello. Elizabeth le había hablado de ese lugar. Solía decir que era su lugar en el mundo. 

Toby miraba a los dos chicos y pensó que quizás tendrían que haber ido todos, esto podría no ser lo que esperaban.

¿Sueño o pesadilla?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora