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-Tomaremos un descanso y nos iremos al anochecer.-Avisó el líder de la misión dejando al resto de los ANBU en un restaurante, generalmente cuando eres parte de los ANBU no podían entrar a pueblos a comer o dormir, tenían que permanecer en el bosque ocultos, sin embargo ahora todos estaban encubiertos y la misión había terminado, así que podían darse el "lujo"

-¿Vamos a recorrer el pueblo?-Preguntó una chica con una leve sonrisa a lo que los demás se alzaron de hombros y salieron del restaurante, Itachi los siguió sin tener nada más que hacer, se había acostumbrado rápidamente al ritmo de ANBU pero era la primera vez que tenía la oportunidad de convivir con sus compañeros, bueno, si es que en realidad ellos consideraban convivencia hablar con alguien que tenía la edad de sus propios hijos.

El pueblo en el que estaban era tan lejano que dudaba mucho que hubieran visto antes a un ninja, era puerto así que había muchos vendedores ofreciendo múltiples cosas, el Uchiha se planteó la posibilidad de llevarle algo a Sasuke o a su madre pero lo descarto, si hacía eso lo más seguro es que su padre lo reprendiera por no tomarse enserio el papel que desempeñaba.

-¿Flores? Pensé que a tu esposa no le gustaban.-Comentó el que solía llevar la máscara de águila a un Hyuga, al entrar a ANBU Itachi no notó que había un miembro del clan Hyuga en su equipo, no fue hasta que lo vio matando a un criminal con un golpe en el pecho usando palma abierta.

-Son para mí hija.-Respondió con una leve sonrisa tomando un ramo de flores realmente bonitas y exóticas.

-¿Y por qué dos ramos?

-Le gusta ir a dejar flores al cementerio, es un tanto espiritual.

-No suena a qué la hayas criado tu.-Se burló mirando igualmente las flores.

-Bueno, no la veo mucho pero intento ser buen padre, siempre que estoy en la aldea le compro flores.

-Si la mimas tanto, ningún hombre va a cumplir sus expectativas.

-En parte esa es la intención.-Asintió mientras pagaba los ramos de flores y sacaba dos pergaminos para guardarlos con ninjutsu espacio-tiempo.

-Dame un respiro, sabes que a mi hijo le gusta tu hija desde hace tiempo.

-Y sigo queriéndolo lejos.

-¿Tiene algo de malo mi hijo?-Se quejó poniendo mala cara.

-Solo el hecho de que tú hijo es 3 años mayor que ella.-El hombre pareció querer decir algo pero terminó dándole la razón al Hyuga.

-De cualquier forma deberías acostumbrarte, tu hija tendrá a muchos mocosos detrás de ella ¿Cuántos años tiene ya?

-12.

-La misma edad que tú, muchacho.-Le revolvieron el cabello a Itachi quien solo se había mantenido al margen en la conversación, se sintió incómodo ante el contacto pero lo entendía, él era un niño para ellos e incluso para sí mismo seguía siendo un niño.

Cuando el tiempo libre se terminó emprendieron el camino de regreso, a pesar de lo lejos que estaban de Konoha pudieron llegar en menos de 5 días de viaje.

-Te toca la guardia hasta la tarde, iré a dormir un poco y te relevare.-Le indicó el Hyuga a Itachi que asintió y desapareció en una bola de humo para emprender camino a la central ANBU, mentiría si dijera que no estaba cansado pero eso no lo eximia de sus deberes, tenía que estar a la altura de todos esos hombres si quería avanzar en su camino.

La guardia fue bastante tranquila para el horario, considerando que llegaron a medio día y su turno terminaba casi al anochecer, sin embargo no hubo nada que reportar, la aldea parecía en paz y eso era suficiente para hacerlo sentirse feliz y relajado a pesar de la situación por la que estaba pasando su clan.

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