NAIPES (II): UN VIAJE LARGO Y DURO

Capítulo 25: Iriana.

Cuando entra en la famosa taberna de la tía de Sota de Bastos, Sota de Copas percibe una gran nube de energía negativa. El ambiente en el lugar es pesado, aunque nadie allí parece notarlo, porque la taberna está abarrotada de gente del lugar que bebe cerveza sin parar y zampa sus platos de cochinillo y de potaje sin percatarse de lo que hay allí. De entre los nuevos visitantes., Sota de Copas no es la única en percibir esa energía negativa tan abrumadora. Caballo de Bastos está tiritando de miedo, ni siquiera parece él mismo. La hechicera se le acerca.

Sota de Copas: ¿Esa es Iriana?

Al fondo de la taberna, la nube de energía negativa es (aún) más pesada y se reconcentra en un solo punto: una especie de tenderete en la que una joven muchacha con apariencia inofensiva le echa las cartas a una anciana. "Amarres baratos. 2 monedas de bronce", está escrito sobre las tablas de madera.

Caballo de Bastos asiente como puede, porque apenas consigue tenerse en pie. El miedo que le tiene a Iriana es superior a sus fuerzas. Se ha enfrentado a criaturas de todo tipo, ha entrenado y luchado durante años para convertirse en el más fuerte, ha derrotado al archiconocido Sirocco y hasta ha trabajado en La Pollería, pero Iriana siempre le dará miedo. Más después de haber pasado años sin verla. Casi ni se acordaba de el mal rollo que le daba.

Sota de Copas: ¿Te afecta la energía negativa?

Caballo de Bastos: Eing.

Sota de Copas: Sí, la energía negativa que emana la prima de Sota de Bastos. Estás así por eso, ¿no?

Caballo de Bastos: Es que estoy ac*jonao.

Sota de Copas: Entonces supongo que será por eso...

Caballo de Bastos: Me ha pillado un poco en shock, hacía mucho que no la veía...

Mientras tanto, Sota de Bastos mira al frente, es el momento de enfrentarse a sus miedos. Si ha llegado hasta allí, no hay vuelta atrás. Es el momento de avanzar y saludar a su prima. Cuando da un paso al frente, alguien le frena.

Caballo de Copas: ¡¡Un momento!! ¿¿Esa es tu prima??

Sota de Bastos: Sí.

Caballo de Copas: Ah, pues me parece una persona normal y corriente. No da miedo ni nada. Me parece a mí que sois un poco exagerados y tenéis un poco de ansias de protagonismo, eh...

Sota de Copas: Tiene un poder mágico de 90... Como poco...

Caballo de Copas: ¿¿Lo qué??

Sota de Copas asiente. Sota de Bastos sigue dando pasos hacia delante.

Caballo de Copas: Oye, ¿y por qué tienes que ir a saludarla? ¿No podemos sentarnos, pedir la comida, cenar y ya?

Sota de Bastos: Es su taberna, es lógico que salude. Al fin y al cabo somos familia.

Caballo de Espadas: Sería descortés no saludar.

Caballo de Copas: ¿Y qué más da? No entiendo este rollito con la educación. A veces solo hay que sentarse...

Sota de Bastos pasa de él y continúa hacia el gabinete/consultorio de Iriana. El resto no tiene otra que seguirlo. Caballo de Bastos lo hace muy a duras penas, aunque mantiene su compostura para no aparentar debilidad delante de una persona tan poderosa como es la prima de Sota de Bastos.

Cuando llegan al lugar, la atmósfera negativa es muy fuerte, hasta Caballo de Copas es capaz de percibirla, aunque no le importa, porque entre negatividad y maldad se siente en su salsa. Iriana es una chica joven, de apariencia inocente, menuda y de baja estatura, con el pelo castaño claro recogido en dos trenzas bajas y de aspecto amable. Cuando la señora a la que está atendiendo, su mirada y la de Sota de Bastos se cruzan, se siente la tensión en el ambiente y hasta se puede cortar con un cuchillo. Todos miran expectantes a ver qué pasa, de qué salseo se pueden enterar.