MC | Sr.Stone (18+) María Cruz ©

Capitulo 08.

Capitulo 08:

Estoy inmersa en mis pensamientos, jugando con mis labios mientras sostengo el bolígrafo en mis manos. Me encuentro perdida en mi propio mundo, recordando al hombre del viernes, su mirada intensa, sus besos. Por un lado, siento curiosidad por descubrir más sobre este enigmático hombre, pero al mismo tiempo, algo me detiene. Liz entra en mi oficina, emocionada y gritando.

-¡Dios mío!- Exclamo con un pequeño grito, asustada. -Me asustas, Elizabeth.

-¡No lo vas a creer!-grita, llena de emoción. -El señor Stone respaldó nuestra propuesta y nos eligió como la mejor opción para financiar los productos de su nuevo proyecto. ¡Maldición!- Grita mientras me abraza.

-Oh, ¿de verdad? -Murmuro, sorprendida. No me lo esperaba para nada.

-¡SÍ, maldita sea! ¿Puedes creerlo? Entre todas las compañías financieras, nos eligió a nosotros. Pero eso no es lo mejor de todo.- Grita felizmente. -Mira con tus propios ojos. -Me da la respuesta en su correo electrónico. -Bajo la única condición de que te encargues del financiamiento y seas su sucesora. Solo trabajará contigo, señorita Tamara Greyson. -Grita aún más emocionada.

Me sorprende leerlo, ya que dice exactamente eso, y mi nombre.

-No puedo creerlo.- Digo, todavía incrédula.

-Felicidades, Tamara. Lo lograste.-dice Elizabeth, bromeando con una voz graciosa.

-Lo hicimos. Trabajaste mucho más en esa propuesta que yo. Tú eres quien se merece esto, Liz.- digo, preocupada.

-¿Estás loca? - responde. -Fuiste tú quien llegó hasta allí, quien se atrevió a hacerlo.-Y deja muy claro aquí, léelo. Señala su celular. -No solo fue la propuesta la que cumplió mis expectativas, sino también la audacia e inteligencia de la señorita Tamara Greyson.- Imita la voz de James Stone y comienzo a reír a carcajadas.

-Joder -vuelvo a decir, sorprendida-. No me lo puedo creer. -Elizabeth baila emocionada.

-Esto llevará a InterBank a otro nivel. ¿Puedes entender la magnitud de este proyecto? -explica Elizabeth, emocionada.

Marcus entra con una gran sonrisa y aplaude.

-Felicidades, Tamara. Lo lograste -celebra Marcus, emocionado junto a Elizabeth.

Debes encontrarte con él hoy a las tres de la tarde." Ha dejado todos los detalles ahí", explica Elizabeth, señalando el correo electrónico.

Esto va más allá de lo impresionante. Aún no puedo creerlo. Cuando entré a esa empresa sin confiar en mí misma, pensando que la arruinaría, resultó ser todo lo contrario.

La emoción sigue fluyendo por la oficina mientras me doy cuenta de la magnitud de lo que acabamos de lograr. Es una oportunidad única para InterBank y para mí. Aunque todavía me cuesta creerlo, sé que debo enfrentar este desafío con determinación y confianza.

Miro a Elizabeth, a Marcus y a todos los miembros del equipo que nos han apoyado en este proyecto. Su entusiasmo y alegría son contagiosos y siento una mezcla de gratitud y responsabilidad.

-Gracias a todos por creer en mí y por su arduo trabajo en esta propuesta que hicimos -expreso, con sinceridad en mi voz-. No podríamos haber llegado tan lejos sin su dedicación y talento. Estoy orgullosa de ser parte de este equipo.

Elizabeth se acerca y me abraza de nuevo, esta vez con una expresión de complicidad.

"Tamara, eres la fuerza impulsora detrás de todo esto. Tu valentía y habilidades nos han llevado al éxito. No te menosprecies. Eres una líder natural".

Sus palabras resuenan en mi mente, recordándome que confíe en mis habilidades y acepte el reconocimiento que merezco. Esta oportunidad no es solo un logro personal, sino también una muestra de confianza en el trabajo de todo el equipo.

Con renovada determinación, me acerco a mi escritorio y leo el correo electrónico. Observo cada detalle y me preparo mentalmente para el encuentro con el Sr. Stone. Esta será una prueba crucial para demostrar mi competencia y garantizar el éxito de InterBank en este proyecto.

Mientras repaso la agenda del día, siento una oleada de entusiasmo y determinación. Estoy lista para enfrentar este nuevo desafío y llevar a InterBank a un nivel aún más alto. Es hora de hacer lo mejor que pueda y mostrarle al Sr. Stone por qué eligió trabajar conmigo.

A medida que avanzo hacia la puerta de mi oficina, veo al equipo sonriente y confiado. Juntos, nos dirigimos hacia el futuro, listos para hacer historia en el mundo financiero. La puerta se cierra detrás de mí, y una sensación de emoción y determinación me envuelve. Hoy es el comienzo de una nueva etapa en mi carrera, y estoy lista para brillar.

Recuerdo claramente lo nervioso e intimidado que me siento cuando estoy frente a James Stone. Sin embargo, sé que debo mantener la compostura y no mostrarle mis emociones. Me enfoco en mantenerme fuerte y seguro de mí mismo.

A lo largo del día, el ambiente en la oficina es relativamente normal, aunque Elizabeth no puede ocultar su alegría. La observo hacer llamadas y noto que Alexander entra a su oficina. Cierro los ojos por un momento, esperando que Elizabeth no vuelva a caer en las garras de Alexander. Aunque es nuestro jefe, sé que es manipulador y desleal.

Regreso a mi oficina para ultimar los detalles finales de la reunión con el Sr. Stone, cuando de repente Marcus llama a la puerta.

"¡Oye! Saluda con una sonrisa. "¿Podemos hablar?"

"Marcus, no tuve tiempo de acercarme a ti. ¿Algo pasa? Pero por favor, dime de inmediato qué está pasando -respondo, mostrando mi preocupación.

"Todo está bien, de hecho, no es eso. Es solo que..." Marcus se apaga, buscando las palabras correctas. - Yo quería preguntarte algo. No quiero ser grosero o hacerte sentir incómoda -dijo, rodando los ojos juguetonamente.

"¿Sí?" Pregunté, sintiéndome un poco tímida.

"Tengo dos entradas para un concierto de jazz el sábado. Iba a ir con una amiga, pero me canceló a último minuto, me preguntaba si tienes planes o si te gusta el jazz.-pregunta, esperando una respuesta.

Le di una sonrisa y asentí.

"No tengo nada planeado para el sábado, y nunca he ido a un concierto de jazz", admití con una sonrisa. "Así que parece el momento ideal para ir a uno".

No parecía esperar esa respuesta y noté cómo sus ojos brillaban y su sonrisa se ensanchaba aún más.

-Perfecto, entonces me pasas tu ubicación y te paso a buscar el sábado a las seis. - Responde cortésmente.

"Por supuesto." Sonreí.

Cada palabra que salía de sus labios tenía un tono amable y persuasivo, envuelto en una misteriosa aura de confianza. Marcus es un hombre impresionante. Sus ojos avellana destacan en contraste con su tez, y su cabello negro profundo, por lo general despeinado, le da un aire atractivo y despreocupado. Además, tiene una barba muy bien cuidada que realza aún más su atractivo. En resumen, Marcus es, sin duda, un hombre hermoso.

Siempre he tenido la sensación de que Marcus se sentía atraído hacia mí. Elizabeth a menudo me lo comentaba, aunque él siempre ha sido discreto y respetuoso al respecto. A pesar de su interés, Marcus nunca ha sido entrometido ni ha intentado traspasar los límites. Su comportamiento siempre ha sido tranquilo y reservado, algo que he apreciado y valorado en él.

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