Capitulo 37. [18+]

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Capítulo 37:

Sin previo aviso, me levanta con sus brazos, mis tacones ya no tocan el suelo. El frío del metal de su escritorio se siente en mis nalgas, y un gemido escapa de mis labios por el contraste entre mi ardiente piel y la superficie helada. Fija su mirada en la mía y engancha una mano alrededor de mi tobillo. Desliza sus suaves dedos por mis muslos, siento cómo mi pulso se acelera en lo más profundo de mi ser mientras todo mi cuerpo se calienta.

James me dedica una media sonrisa se coloca entre mis piernas, separándolas más. Deslizo una mano por la parte trasera de su cuello, acercando sus labios a los míos. Su beso es ligero como una pluma al principio, pero instantáneamente se vuelve más profundo. Deslizando una mano por mi espalda, con sutileza, explorando cada curva. Su mano se posa en mi trasero para acercarme más a su cuerpo, mientras que la otra acaricia mi muslo.

Nos quedamos mirándonos el uno al otro, sin decir una palabra. La tensión y la anticipación llenan el aire mientras nuestros cuerpos anhelan el contacto.

-Mi polla palpita rogando tú atención.-susurra James contra mi oreja, provocando que mi piel se erice con anticipación.

James me examina detenidamente, como si quisiera memorizar cada detalle de mi. Sus ojos se posan en mis piernas, enfundadas en unas medias de lencería negras que se ajustan sensualmente a mis muslos.

-Eres perfecta, he deseado tocarte desde el primer día que te vi. -murmura, haciendo que mis rodillas tiemblen de nerviosismo. Le regalo una sonrisa tímida y separo mis labios para tomar respiraciones entrecortadas. Me siento completamente fuera de mi elemento, vulnerable ante él.

Con suavidad, su mano se desliza por la parte posterior de mi muslo antes de apretar una de mis nalgas. No puedo evitar soltar un gemido entrecortado que escapa de mis labios. Lo veo sonreír al darse cuenta de que estoy disfrutando su contacto y quiero más.

-¿Estás lista para jugar con fuego Greyson? -murmura, acariciando mis muslos y rozando sus labios en la piel sensible de mi cuello.

-Sí, señor Stone. -digo en un hilo de voz, dejando que sus manos me guíen, cediendo el control a él. Sin apartar su mirada de la mía, se inclina con cuidado, y sus labios encuentran los míos en un beso apasionado. Nuestras bocas se fusionan en una danza sensual mientras nuestras lenguas se entrelazan. Sus manos exploran mi cuerpo, bajando lentamente la cremallera trasera de mi vestido dejando al descubierto mi piel y me estremezco bajo su tacto.

El aire se carga de electricidad mientras nuestras manos se exploran mutuamente, buscando cada centímetro de piel expuesta. Cada caricia, cada beso, enciende la pasión dentro de nosotros, consumiéndonos por completo.

Llevo una lencería negra de encaje, mis pezones pueden ser visible a través de la pequeña pieza que realza mis senos. Sus manos recorrieron mi cuerpo, explorándolo con deseo. Desabroché el botón de sus pantalones con determinación, mientras James permanecía estático, observándome. Se mordió el labio inferior mientras yo deslizaba una mano por su estómago y bajaba el borde de su pantalón para tomarlo firmemente.

Un suspiro escapó de sus labios cuando sintió mi mano envolver su miembro erecto. Mis labios se separaron para inhalar aire. jadeando ante mis estímulos. James movió sus caderas para encontrarse con cada uno de mis movimientos.

Me sorprendo por su gran grosor y tamaño, no lo he visto pero es evidente que es muy grande y grueso.

James se inclina y con suavidad separa mis piernas dejando que su dominio se haga evidente. Con determinación, desciende lentamente mi braga, rozando y deslizando la suave tela sobre mi piel delicada.

Levanté mis caderas, ofreciendo mi depilada feminidad sin inhibiciones. Sin dudarlo, James se acercó y su lengua se sumergió en mi coño, trazando un camino de placer a lo largo de mi sexo. Recorría cada rincón, desde mi clítoris hasta mis labios vaginales, incluso adentrándose en mí con la punta de su lengua de forma casi penetrante. Sentía una sensación celestial, era la primera vez que alguien me brindaba sexo oral de esa manera, y el cálido y húmedo contacto que recorría mi vagina me enloquecía por completo.

Bailo con gracia y sensualidad bajo su tacto, dejando que mis movimientos imiten los de una serpiente hipnotizante. Arqueo mi cabeza hacia atrás, permitiendo que mi espalda se curve en una sinuosa elegancia. Con los ojos cerrados, dejo que mis dedos acaricien mi cuello con suavidad, ascendiendo hasta encontrarse con mi sedoso cabello.

James empezó a lamerme con una intensidad casi desesperada, provocando que mis manos se aferraran ahora a su corto cabello sedoso. Totalmente cautiva por la excitación, dejé escapar gemidos sin importar que me escuchen, a James parecía importarle muy poco que yo gimiera y disfrutara de este ilícito encuentro en su oficina. Desliza dos dedos profundamente en mi interior, haciendo que me estremezca y retuerza mientras aumenta su ritmo. Con un último movimiento de sus dedos, algo dentro de mí se rompe. Grito su nombre mientras tiemblo de placer en oleadas.

-¡Oh Por dios!- jadeo moviéndome a su ritmo, siento los movimientos de sus dedos en mi interior de forma circular, no puedo evitar moverme como una serpiente bajo su tacto, me estremezco mi cuerpo pide más, James saca y mete sus dedos repetidamente con suavidad, llevándome hasta el punto más alto de placer, los deja adentro y comienza a moverlos lo mas rápido que puede sin detener el movimiento de su lengua.

-¡Ay por Dios James! no te detengas.-Finalmente siento la oleada de placer invadir mi cuerpo por completo, llevándome a un delicioso deleité del orgasmo, sentía los fluidos bajarme a chorros pero James no perdía tiempo en saborearlos, y aún así continuaba con su trabajo ahí abajo como un profesional, ya no podía más, pero James continúa sin detenerse, llevándome al extasié de un segundo mini orgasmo entonces lo apartó con mis manos porque ya no puedo más siento que moriré si no se detiene.

Sin dudarlo, James se pone de pie y se acerca rápidamente a mis labios, tomando mi nuca con firmeza. No me resisto y separo mis labios para recibir su lengua, entregándome por completo a su pasión. Su lengua cálida y hábil baila en perfecta armonía con la mía, creando un torbellino de sensaciones irresistibles haciendo que pruebe el sabor de mis propios jugos.

Mis manos nerviosas pero decididas desabrochan con delicadeza cada botón de su camisa, liberando su torso escultural. Observo extasiada por primera vez su cuerpo perfecto, acariciando suavemente sus pectorales con la punta de mis dedos mientras él permite mis caricias. Mi atención se centra en un tatuaje intrigante que casi abarca toda la zona, una carabela en tinta negra. Sin poder resistirme, acerco mis labios a su pecho firme y deposito suaves besos sobre su piel tibia y seductora, sintiendo cómo él se entrega a mis deseos sin restricciones.

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MC | Sr.Stone (18+) María Cruz  ©Unde poveștirile trăiesc. Descoperă acum