NO ESTAS SOLO ME TIENES A MÍ

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El silencio se levantaba reacio ante las murmuraciones leves que salían de las bocas de los empleados de la Condesa.

Los peones pudieron percatarse del estado de ánimo de Noé. La noticia de la muerte de Clemente se esparció pronto entre la gente de la hacienda. Hablaron de ello parte de la mañana y la tarde. 

Las miradas piadosas que le dirigían al muchacho lo descomponían aún más,no sabía si podría superar el hecho.

Ocultaba la mirada de los demás que lo miraban con pena y supuesto agobio. 

Los preparativos previos a la muerte del administrador ya habían comenzado,aquel salón de estilo victoriano era el mas adornado de todos,pero no había nadie ahí que disfrutara de la amplia y hermosa decoración.

El llanto lastimoso de una mujer,sobresalía de entre los demás acompañantes. 

Catalina sufría la pérdida del único hombre que amó en su vida,el secreto de su relación con Clemente estaba siendo revelado ante la mirada acusadora de los habitantes de la hacienda,el hecho de que ella le llorara sin ser la legítima esposa del hombre,era acto de escándalo para algunos santurrones que se sentían con el derecho de juzgarla.

Poca importancia tenía para ella las críticas que un par de resentidos pudieran sentir por ella,su dolor era mas grande que las quejas de los demás.  

Noé por su parte la miraba con cierto recelo,el joven no estaba enterado que pasará algo entre su padre y Catalina,pero tampoco se sentía con derecho de juzgar a nadie,pues el tenía poco conocimiento de la vida del empleada de mayor confianza de la Condesa.

Se aproximo a ella con la mirada enrojecida por el llanto que lo había consumido los últimos minutos. 

La mujer le devolvió la mirada con un gesto de ternura que hizo estremecer a Noé hasta el alma. 

La abrazó con fuerza acunandola hacía el. En esos momentos probablemente aquélla mujer fuera la única persona en el mundo que pudiera entender su profundo dolor.

—¿Lo amaba verdad?—preguntó gentil el muchacho. Ella asintió avergonzada. Sentía pena de que el hijo de su amado se enterara y pudiera juzgar a mal el hecho de que estuviera enamorada de su padre.

Noé levantó su mentón para posar una mirada de aceptación en ella. 

Noé era notablemente mas alto que la mujer,ella tenía que elevar su rostro para poder ver esos ojos verde amielado.

—Gracias por amar a mi padre—le dijo en un acto insólito para la mujer.—El realmente necesitaba de alguien a su lado.—Siguió hablando,pero Catalina seguía con el mismo gesto de impresión que antes.

—¿No estas molesto conmigo?—preguntó Catalina.

—¡No,por dios no! ¿Porque debería estar molesto?—preguntó Noé con prisa.

—Porque—titubeo—permanecía con expresión de asombro.

—Porque era su amante ante los ojos de muchos,pero yo puedo asegurarte que no me veía con maldad,no sólo su amante. Era su amiga y compañera.

El joven medito un poco sus palabras, si era verdad que no era una noticia fácil de asimilar. Pero al final de cuentas era la decisión de su padre y merecía tal respeto como si todavía estuviese presente.

—No me molesta Catalina,usted y mi padre se amaban y eso para mi es suficiente. El tiempo de felicidad que le regaló a mi padre compensa cualquier amargura que hubiera podido desarrollar en su contra,pero honestamente no le tengo ningún recelo ni nada por estilo.

MEDIA NOCHEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora