🔗 Última vez 🔗

169 22 13
                                    

Sintió la brisa golear su rostro, por lo que despertó, encontrándose en un lugar completamente desconocido para ella.

Se levantó de aquél árbol y miró al frente, una ciudad que no conocía, miró hacia atrás, ahí estaba el bosque pero...sería otro lado del bosque?

- ¿Qué es esto? - se preguntó

Bajó sus manos de su regazo pero una de ellas chocó con una piedra. Leyó la insignia y su corazón se estrechó.

- ¿Eren? - preguntó con ojos brillantes por lágrimas, se colocó frente a la lápida, ¿a caso al fin encontró la tumba de su pasado amor?

- Eren - volvió a decir, pero ésta vez quitó la piedra y comenzó a excavar con sus propias manos mientras lloraba. Quería comprobar que estuviera ahí realmente, sintió que no tardó mucho para llegar a un metro y medio de profundidad, no había nada.

- Eren, ¿Dónde estás? - preguntó al aire - ¿Dónde? -  repitió

Un fuerte viento hizo caer su bufanda al hoyo, Mikasa la quedó viendo un rato, trató de tomarla nuevamente pero no pudo, la tierra la tragó. La azabache, desesperada comenzó a excavar de nuevo con sus propias manos.

- Por favor, no me quites lo único que tengo de él - suplicó - Por favor - pidió de nuevo

- ¡Dijiste que siempre estarías conmigo, Eren! - replicó

Pronto comenzó a despertar en su propia realidad. No era muy tarde, ni muy temprano pero tenía claro que la bufanda no estaba en su cuello.

 No era muy tarde, ni muy temprano pero tenía claro que la bufanda no estaba en su cuello

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

Se acercó y rodeó el torso de Levi con cariño y necesidad de calor. Al tocarla, sintió como su piel estaba muy fría por lo que decidió cubrirla con la cobija que se encontraba por las rodillas de ambos.

- Tengo miedo, Levi -  habló

- ¿Por qué? -

- Solo falta un día para la manifestación y no lo sé, algo dentro de mí...siente que algo malo va a pasar -  dijo

- Ayer me mostraste que puedes moverte y pelear de manera increíble, no hay porque temer, estaremos bien -  besó su frente

Su mente remontó al día anterior, después de dormir tres horas comenzaron a entrenar. Lo estaban tomando muy en serio, tanto como para enfadarse uno con el otro.

« - Vamos, pelea en serio niña, ¿A caso es todo lo que tienes? - »

« - ¡Cállate! - »

« - ¡Cállate! - »

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
El sufrir de un AckermanWhere stories live. Discover now