Sonriendo en la oscuridad.

920 105 90
                                    

La vida, a veces nos lleva a lugares que pensamos que nunca lograremos alcanzar, pero sin saber muy bien el porque, nos atrapan.


Cuando echo la vista atrás, ni loca hubiera pensado, que me encontraría donde me encuentro ahora, pero lo cierto es, que en el fondo de mi corazón se que era algo que siempre había deseado, pero en lo que nunca me había permitido pensar.


Allí estaba yo, como siempre, con esos horribles nervios en el estomago, que me trasladaban a un pasado, al que ya no quería regresar. El tiempo me había llevado a donde me encontraba ahora pero, ¿y si el sueño que estaba viviendo se rompía? ¿ y si no tenía a donde volver? ¿me estaría esperando mi vida pasada si decidía volver a ella?


Esta persona que espera para salir al escenario, no parezco yo, es como si en el último año de mi vida, una nueva Irene hubiese nacido, atropellando a la vieja Irene como una locomotora a toda maquina. ¿Cómo podía ser que llegado el momento de decidir, ni me hubiese preocupado, que iba a ser de mí si algo salía mal?.


Cuando decidí embarcarme en este proyecto, hace mas de un año, mi vida estaba totalmente organizada. Tenía un buen puesto de trabajo en una empresa de publicidad, vivía con mi mejor amiga Vico, en Madrid, como siempre habíamos soñado y era feliz con lo que tenía. Pero aunque no me atrevía a decirlo en alto, sabía que me faltaba algo, era como que una parte de mi, estaba incompleta.


Recuerdo como Vico, me decía una y otra vez antes de tomar la decisión, _el que no arriesga no gana Ire_ , y yo le contestaba, - pero si arriesgo tengo muchas posibilidades de perder- , y ella mirándome mientras me guiñaba un ojo, me contestaba, - eso es verdad solo pierden los que arriesgan, pero también son los que mejor se lo pasan_ .


Sin mucho convencimiento, tome la decisión de probar, y embarcarme en esta aventura, era un clarísimo caso, de un ahora o nunca, y decidí que fuese un ahora.


Gracias a esa decisión, me encuentro entre las cortinas de este escenario, preparándome para salir, a la representación 100 de mi musical. Normalmente, ya estoy nerviosa, antes de salir al escenario, pero hoy todavía lo estoy más. ¡Espero no fastidiarla!, porque hay demasiada gente, que se merece que lo haga perfecto. Esa gente, que me ha apoyado desde el principio, y han luchado porque yo este aquí, casi tanto como yo.


Cojo aire y lo expulso unas cuantas veces, miro alrededor para comprobar que nadie me ve, y cumplo con mi ritual particular, de pellizcarme en el brazo tres veces antes de salir al escenario, para recordarme que no estoy soñando y que esta es la realidad. Termino con el tiempo justo de entrar a escena, ya cantando mientras el resto del elenco me arropa , estar aquí me hace sentir viva, y no entiendo como he podido, pasar tantos años sin esta sensación, ahora que la he probado es como una droga y no me veo capaz de poder seguir mi vida sin ella en un futuro.


Diario de una Grosella.Tempat cerita menjadi hidup. Temukan sekarang