copper coins

capítulo 31: cerradura tallada, parte 3

Lu Nianqi lo tomó como un sí. Su rostro pareció sonrojarse con un poco de calidez.

Siete u ocho botes se disputaron un espacio junto a la orilla del río. Todos los pasajeros de los barcos se habían bajado y estaban dando vueltas en grupo, parecían estar trabajando juntos para arrastrar algo a la orilla.

"Dios mío ... ¿Cuándo se ahogaron estas personas?" Alguien dijo. "¿Por qué están todos podridos?".

"En todos los años que he recogido cadáveres aquí, nunca me he encontrado con algo como esto". Esa era la voz del buceador de cadáveres.

Después de que Nianqi regresara a la vida en el bote del buceador de cadáveres, el anciano había decidido dejar los otros cuerpos en el agua por un momento y remar de regreso con los tres que ya había recogido. Solo después de colocar a Shijiu y al Viejo Liu en el terraplén y darle a Nianqi un poco de alcohol caliente para calentarlo, el buzo de cadáveres regresó al río.

Al escuchar al buceador de cadáveres describir la escena, los pescadores en reposo junto a la orilla decidieron echarle una mano.

Pero sus botes no eran aptos para transportar muertos; al ser barcos de pesca y cruceros de placer, habría sido un mal presagio. En cambio, ayudaron al buzo de cadáveres a sacar de su bote los cuerpos que parecían bolas de algodón podridas. Pronto hubo una inquietante fila de cuerpos dispuestos en la orilla.

Xuan Min vio la fila de cuerpos empapados y frunció el ceño.

"Me dio un susto horrible", decía el buzo de cadáveres mientras él y sus colegas llevaban los últimos cuerpos a la orilla del río. "Al principio sólo había seis cuerpos - ¡los conté! Estaban flotando por los islotes. Pero cuando volví a recoger los dos últimos, no sé qué pasó, pero otro flotó. Llegó hasta el lado de mi barco. ¡Y ese sentimiento ...! ".

Xue Xian rascó sutilmente la muñeca de Xuan Min y dijo: "Calvo, mira esos cuerpos. El cadáver que mencionó el buzo de cadáveres fue probablemente el que liberé. No hay forma de que esto no esté relacionado con el diseño de 'Cien soldados que empujan el flujo'. Explicaré más después, pero presta atención por ahora, comprueba si hay algo mal con estos cadáveres ".

Su voz salió ahogada para que nadie más pudiera escuchar, pero Xuan Min recibió el mensaje con bastante claridad, como si el sonido hubiera seguido la forma de su manga y se hubiera deslizado hasta su oído.

El ceño de Xuan Min se frunció de nuevo, luego miró hacia abajo y dijo: "Está bien". Luego, su dedo golpeó la pequeña cola de Xue Xian nuevamente, como una advertencia para que la bestia no se mueva demasiado y permanezca oculta.

Pero la respuesta del vil engendro fue morderle la mano con fuerza.

Dulcemente, Xuan Min dijo: "Déjame ir".

Jiang Shining y Nianqi lo miraron boquiabiertos. "¿Qué quieres decir con 'déjame ir'?".

La expresión de Xuan Min no se transformó - continuó mirando inexpresivamente los cuerpos que habían sido arrastrados fuera del agua. Su mirada los escaneó desde sus esqueléticos pies podridos hasta el desorden de cabello negro en sus cabezas. En comparación con los rostros arrugados y secos de los pescadores mientras se secan y se mueven de disgusto, estos cadáveres en realidad tenían una sensación etérea.

La atmósfera en el terraplén era escalofriante. Cuando Jiang Shining no recibió respuesta del monje, tenía demasiado miedo de presionar al monje, por lo que decidió que simplemente había escuchado mal. Silenciosamente, miró hacia otro lado.