copper coins

capítulo 11: Piedra de molino vacía , parte 2

Las pupilas de esta persona eran anormalmente oscuras sin un solo destello de luz de las estrellas y daban una vibra inquietante. Dos sombras oscuras colgaban bajo sus ojos y su piel estaba tan pálida que uno podía ver las tenues venas de azul debajo. Encontrarse cara a cara con alguien así de repente era bastante aterrador. Si fuera una persona normal, tan pronto como se dio la vuelta y vio un fantasma así, inmediatamente habría saltado tan alto de miedo que se habría estrellado contra el techo.

Sin embargo, Xuan Min y Xue Xian obviamente no eran humanos comunes y corrientes.

Uno de ellos era audaz mientras que el otro era inquebrantable; los dos probablemente no tenían idea de cómo deletrear la palabra "miedo".

Y así, este Calvo tan frío como un carámbano y el vil engendro en su cintura miraron a la persona muerta con idénticos rostros inexpresivos.

El rostro de la persona que acababa de llegar palideció cuando miró hacia arriba, palmeándose el pecho mientras murmuraba: "¿Por qué te diste la vuelta de repente? Me diste un susto ".

Xuan Min, "...".

Xue Xian, "..." este tonto definitivamente debe tener muerte cerebral por toda esa lectura.

La persona que estaba detrás de ellos no era otra que Jiang Shining.

Xue Xian se sintió un poco preocupado al verlo. Pensó: si este tonto hubiera escuchado todo lo que acaba de decir el consejero Liu, podría haberse remangado y atacado directamente. Quién sabe, tal vez este hombre que es tan delgado como un palo podría incluso golpearlos a los dos viejos amigos.

Pero a juzgar por el tono de Jiang Shining, sabía que este no había escuchado esos insultos sobre sus padres.

Debido a esto, Xue Xian se sintió algo aliviado y pensó: Al menos no tendré que preocuparme de que el tonto vaya a llamar a la puerta de la muerte. Se colgó de la boca del bolsillo y miró a Jiang Shining con evidente disgusto mientras lo perseguía. "¡Vuelve de una vez! ¡Vete, vete! ".

"¿Por qué tienes tanta prisa por hacer que me vaya?" Jiang Shining discutía a veces con Xue Xian, pero en realidad, tenía un temperamento suave. De lo contrario, no habría tolerado que Xue Xian lo mandara durante tantos días, teniendo que soportar quejas mientras le metía comida en la boca para callarlo.

Cuando Jiang Shining preguntó "por qué", su cuerpo ya había respondido a las palabras de Xue Xian. Se dio la vuelta para cruzar el umbral y salió por la puerta trasera. Aunque confundido, no cuestionó nada.

Al ver esta escena, Xuan Min estaba a punto de dejar la mano que acababa de levantar cuando escuchó a Xue Xian preguntarle con enojo: "Calvo, ¿por qué levantabas la mano? ¿Finalmente has tenido suficiente de la mirada idiota del tonto y ya quieres darle una paliza? ".

Xuan Min, "..." Según esa lógica, el primero en recibir una paliza deberías ser tú.

"..." Jiang Shining preguntó, "Espera, ¿Qué he hecho para merecer una paliza?".

Xue Xian instó: "Sigue caminando. Deja de decir tonterías ".

Xuan Min, "..." Esta cosa inquieta tiene el descaro de reprender a otro por decir tonterías.

Pero la suposición de Xue Xian no estaba del todo incorrecta. Como un fantasma errante que dependía de poseer elementos como un papel para tener forma humana, solo se aferraba a él con un soplo de energía yin. La Puerta de la Vida estaba ubicada en esa área hueca de tres pulgadas detrás del cuello. Si lo cortaban con una mano en esa área, ese último aliento de energía yin se dispersaría y volvería a su forma original.