copper coins

capítulo 25: esqueletos en el río, parte 2

El agua era más profunda y fría de lo que nadie podría haber imaginado. En poco tiempo, un denso escalofrío se filtró en los mismos núcleos de sus cuerpos.

Cuando Xue Xian sintió el frío inundarlo, sus pensamientos de repente se aclararon como el cristal.

El maldito demonio había estado hirviendo en su sopa de confusión durante tanto tiempo que apenas sabía lo que estaba pasando, pero tuvo la audacia de preguntarle a Xuan Min, que todavía lo sostenía en su mano, "Calvo, ¿Cómo es que estoy en el ¿agua?".

¿Quién diablos sabe?

Xuan Min no respondió.

El demonio preguntó: "¿Por qué estás aquí también?".

Xuan min todavía no respondió.

Nadie sabe.

Al ser un orbe, las facultades de Xue Xian no se vieron afectadas por el agua y, naturalmente, podía hablar cuando tenía ganas de hablar. Pero si Xuan Min optaba por abrir la boca, inmediatamente tragaría galones de agua, y el problema no era el frío, sino el hecho de que se desconocía el origen del agua, ni tenían idea de cuánto tiempo había pasado. en la caverna. Definitivamente fue repugnante. ¿Hacer que Xuan Min bebiera eso? También podrías ahogarlo en ese mismo momento.

Mientras hablaban, la superficie del agua se alejaba rápidamente. Con un golpe masivo, el orbe dorado aterrizó en el fondo de la piscina.

Aunque la gruesa capa de sedimento y suciedad en el fondo de la piscina amortiguó su caída, la mano de Xuan Min se convirtió en pulpa. Los huesos de cualquier otra persona se habrían convertido inmediatamente en polvo.

En su estado semiconsciente, Xue Xian tuvo la sensación de que, de alguna manera, algo de su carne había regresado. Y aunque había podido soltar un par de frases, el insoportable crescendo de calor seguía abrasando su mente, la implacable sensación de vértigo le daba ganas de vomitar. Se revolcaba caóticamente en el sedimento como una mosca decapitada, como impulsado por un impulso primitivo e innato; parecía estar buscando algo.

Tan pronto como el lecho de sedimentos fue perturbado, motas de tierra entraron en erupción en el agua y cubrieron todo lo que tenía en la vista. No importaba encontrar algo perdido, sería un milagro si pudiera mantenerse consiente de lo que estaba pasando consigo mismo.

"¡Estoy harto de esta agua turbia!" Xue Xian escupió en un tono nervioso. Parecía incluso más irritable de lo habitual, si es que eso era posible.

Dónde está, dónde está, dónde está ...

Ni siquiera estaba seguro de qué era lo que estaba buscando, pero esa frase daba vueltas en su cabeza, repitiéndose sin cesar.

Silbido--

Ese estruendoso sonido de golpe sonó una vez más, lo que provocó que Xue Xian entrara en pánico. La vibración había perturbado aún más el suelo de sedimentos y el agua se volvió cada vez más opaca. Xuan Min, acariciando su mano destrozada, rápidamente perdió de vista el orbe dorado.

Ninguna persona en su sano juicio podría soportar quedarse mucho tiempo en esa piscina infinitamente profunda, y Xuan Min no era la excepción.

Lu Nianqi fue el primero en sucumbir. Anteriormente, mientras sufría un ataque, había evitado por poco que Xuan Min le golpeara en la parte posterior de la cabeza, pero no pudo escapar del agua hambrienta. Después de tragar varios galones más de agua, se quedó quieto.

El siguiente fue Jiang Shining, quien había sido devuelto a su pequeña forma de papel. Como él mismo era un fantasma, no necesitaba respirar, pero en medio del feroz e implacable flujo del agua, su cuerpo de papel estaba a punto de ser disuelto por el agua.