Laced | Zayn Malik (Español)

Capítulo 32 (Demasiadas Opciones)

Abby:

El gran día era mañana y el todo el tiempo la población de mansión estaba en modo de preparación. Nunca pensé que estaría tan ocupada y frenética, pero lo estaba.

La mayoría del trabajo estaba siendo hecha por los sirvientes usuales, quienes pasaban de largo con platos y bolsas y vasos y cajas en los corredores, colocándolas en uno de los salones de baile no usados sobre el área del escenario con sillas.

Los sirvientes también nos servían los esclavos inferiores, empujándonos a cada uno dentro de nuestras habitaciones para ser colocados dentro de costosos y largos vestidos que el Amo Zayn compró para cada uno de nosotros. Era tedioso estar de pie todo el día, mirando el espejo triple que tenía en mi armario y me probaba todas las cosas que tiraban hacia mí.

Lo más agresivo era el renombrado diseñador que Zayn contrató para hacer los trajes. El diseñador sin compasión me forzó a probarme vestido tras vestido, brindándome una mirada de desapruebo cada vez que el vestido no lucía lo bastante impecable.

Para la hora del medio día, estaba exhausto y no tenía energía para probarme otro vestido, Samuel el diseñador, me lanzó. El Amo Zayn asomo su cabeza en la habitación varias veces durante el día para ver como iban las cosas, como hizo para cada uno de los esclavos inferiores quienes estaban en la misma situación que yo.

Aunque todavía no encontramos un vestido de noche, ya le di un vistazo a ese vestido cocktail para la fiesta preliminar que ocurriría esta noche. Todos nos encontraríamos en el salón de baile exactamente a las once en punto, para algunos refrigerios y anuncios.

—Algunos vestidos más Abigail, confía en mí. —Ordenó Samuel tirando otro vestido hacia mí. Este era blanco y holgado, pero la mitad de la espalda y cintura eran descubiertas, cubiertas solo por delgados trocitos de un material plateado.

— ¿Podrías simplemente no? ¿No puedo solo vestir ese vestido rojo que me probé hace una hora? ¡Creí que era lo suficientemente bueno! —Recostándome sobre mi cama simplemente con mis prendas de vestir. Suspire, exasperada.

—No, no es completamente bueno. ¡Solamente pruébate esto por mí! —Ordenó y rodé mis ojos mientras obedecía su orden.

Rodé mis ojos una vez más, antes de quitarme con pena mi brasier negro de satín y alcé mis brazos para cubrir mi expuesto ser. Rápidamente sujete el vestido y me deslicé dentro y por mis curvas. Lo ajuste un poco, el material se acomodaba contra mis curvas.

—Manos arriba, necesito hacer ajustes a los lados.

Levanté mis manos en el aire y Samuel hizo el trabajo, inmediatamente colocando alfileres en el vestido mientras le daba forma al vestido para que encajara exactamente con mi físico. Mientras lentamente trabajaba la tela a la perfección, mis pensamientos vagaron en la conversación que tuve con Perrie y Elle ayer. Me levanté y deje la sala de entretenimiento para hablar con Harry, sin embargo me acobarde el último minuto y en lugar de eso, regresé a mi habitación. Pero hoy, jure encontrarlo y comunicarme. Incluso si eso significaba que tuviera que lastimarme a mí misma para ir al ala del hospital.

Trabajo rápidamente y de pie pacientemente, admire el vestido en el espejo. La espalda expuesta, hombros y cintura me hacían sentir pena por ser algo provocativa.

—Sam, no creo que pueda usar este vestido. Es… demasiado. —Empecé

Se alejo un paso de mí y me dio una mirada estupefacta—. ¿De qué estás hablando? ¡Este vestido es perfecto!

—Creo que es muy subido de tono. La espalda… —Divagué, insegura sobre qué decir.

—Tonterías. El blanco emite un sentimiento inocente y la espalda expuesta y la cintura lo hacen… tenso. ¡Es un perfecto contraste entre los dos!