Laced | Zayn Malik (Español)

Capítulo 10 (Fuera de Casa)

— ¿Estás lista? —Asomó su cabeza por la puerta. Se había puesto vaqueros oscuros que colgaban por debajo de su cintura, una sencilla camiseta blanca y una chaqueta oscura de cuero encima de eso.

—Sí señor. —Asentí, caminando hacia él.

Frunció el ceño, paso junto a mí corriendo al baño—. Vas a necesitar una chaqueta Abigail.

Lo seguí al baño y al armario.

Rápidamente pasó sus dedos a través de las numerosas prendas de vestir que estaban colgadas antes de parar y sacar una percha.

Sobre la percha estaba una oscura, chaqueta italiana de cuero. Suavemente la quitó de la percha, lanzando la chaqueta hacia mí—. Ponte esto. Hace frío afuera.

Me deslicé dentro de la chaqueta y luego vi a Zayn. No pude evitar notar que ambos combinábamos, los dos teníamos pantalones vaqueros oscuros casuales, camisetas blancas y chaquetas oscuras de cuero. Sonreí.

—Ven, —ordenó, colocando una mano sobre mi  espalda, guiándome fuera del armario, luego al baño y a la habitación.

Justamente cuando llegamos a la puerta de mi habitación, se detuvo, volteándome para que lo enfrentara. Sus manos descansaban en mi cadera, manteniendo mi cuerpo precisamente a una pulgada lejos del suyo—. Ahora escucha muy de cerca Abigail. —Comenzó.

Asentí y sentí que su mano se apretaba alrededor de mi cadera, apretándola fuertemente. Inmediatamente corregí mi error—. Sí señor.

Disminuyó su voz y apoyo su frente contra la mía. Sus labios estaban a pulgadas de los míos, como si intentara probarme. Mientras él hablaba, mire cada uno de sus movimientos, hipnotizada—. Bien. Ahora, cuando te lleve afuera, no puedes hablar con nadie a menos de que tengas mi permiso para hacerlo. Mucha gente de los alrededores me conoce y si alguien nos ve o pregunta por nosotros, estamos saliendo ¿de acuerdo? Vas a quedarte a mi lado todo el tiempo. Permanece cerca de mí. ¿Está claro?

—Sí señor. —Asentí.

Hizo pausa por un segundo—. Y sí, por una diminuta oportunidad, te separas de mí, espera, actúa natural y no hables con nadie. —Jaló mi brazo suavemente, colocándolo entre nosotros. Su dedo índice señaló el brazalete rojo que estaba alrededor de mi muñeca—. Seré capaz de localizarte con eso. ¿Cierto?

—Cierto.

—Vamos.

Tomando esta oportunidad y dejando que me fuera con él, confirmó dos cosas. Una, él sabía que no escaparía o que intentaría pedir ayuda para huir. Y dos, sabía que si incluso nos separábamos, haría exactamente lo que Zayn me había ordenado; porque quería quedarme junto a él. Me sentía segura con él.

Se volteó y me mantuvo cerca de él mientras me guiaba a través del laberinto de la mansión, silencioso durante todo el camino.

Cuando llegamos al final del pasillo principal, tomamos la izquierda. En frente de mí estaban dos puertas enormes, en su mayoría hechas de cristal. Dos guardias armados estaban de pie en la puertas, inmensos e intimidantes.

Cuando llegamos a su vista, rápidamente asintieron en reconocimiento a Zayn.

—Buen día Josh, Adam, —expresó Zayn, sujetando las llaves de la cerradura.

—Buenos días señor, —replicaron al unísono.

— ¿Puedes darle a Nick una llamada rápida y decirle que conduzca hasta aquí para recogernos? —Fue como una orden, no una pregunta.

—Sí señor, —replicó Josh, sacando un móvil de su bolsillo. Inmediatamente marcó el número, colocando el teléfono en su oreja.

Un ligero movimiento llamo mi atención y me giré para divisar a la rubia, Perrie, acercándose.