Soft Edges ➠ 【TaeJin】

~50.1~

—Brillan... —musitó el menor al atrapar una entre sus manos, dejándola escapar luego—. Hope.

—¿Hm? —La pelirroja, que se había quitado el lazo que llevaba en la cabeza le observó con curiosidad. De los tres, sólo ellos dos tenían ojos un poco más claros, siendo la mayor la que tenía ojos más claros, justo como los de Hoseok—, ¿Qué?

—¿Tu papá y tu mamá tuvieron una boda? —La pregunta la sorprendió, logrando que hiciera un mohín y luego asintiera con una mueca.

¿A qué venía eso?

Aunque hasta donde sabía, sus padres no habían tenido una ceremonia como la que habían presenciado, cuando preguntaba por qué la única respuesta que obtenía era una sonrisita por parte de su padre y un sonrojo de parte de su madre, que murmuraría cosas que no entendía.

—Sí.

—¿Y fuiste?

—No.

—¿No es raro? Yo tampoco fui a la boda de los míos.

—¿Crees que no se casaron?

—No... Ellos llevan los anillos, como los que Mimi y Soosoo se entregaron—Se dejó caer sobre una rama, pensativo—. Pero los llevan desde que los he visto.

—De todas formas, ¿Qué le pasó a tu cabello?

—Lo corte.

—¿Por qué?

—Porque sí—Y soltó una risita al tomar una rama pequeña para juguetear con las luciérnagas.

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—¿Y los niños? —Taehyung giró bruscamente al escuchar el susurro de su esposo, se disculpó con una sonrisa de los guardias y se alejó, al mismo tiempo que Hoseok se acercaba a ellos, su semblante oscurecido—. Estaban aquí hace un minuto.

—¿Salieron de la sala?

—No pudieron haber ido tan lejos—Suspiró el capitán de la guardia al seguirlos—, miden un poco más de un metro, incluso si corren, ¿A dónde podrían haberse dirigido?

—Al bosque—Seokjin palideció y bajó las escaleras apurado, tratando de encontrar a sus dos pequeños lo más rápido posible.

Desde aquél día que la concubina de su padre había mencionado que su esposo debía alejarse de los bosques, Seokjin estaba aterrorizado de ellos y los veía como lugares prohibidos.

Por suerte, al introducirse en el jardín, encontró a Soobin frente a la fuente, jugando con las flores que flotaban sobre las aguas, sin embargo la calma fue momentánea al no ver a los otros dos niños en los alrededores.

—¡Binnie! —El pequeño dio un salto en su lugar, sacando las manos del agua como si estas quemaran, Seokjin se acercó a él y lo tomó de las manos—. ¿Donde están tu hermano y Hope?

—Fueron al bosque, no quise ir porque estaba oscuro.

El doncel giró a ver a su esposo, casi gimiendo en voz alta al exclamar:

—Voo.

—Quédate aquí, iremos por ellos. —El duque le tomó del rostro y posó un beso en su sien—, están bien, tranquilo.