Él Es Mi Todo [Yaoi, Bl](+18)

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Lucas nunca llamó... tampoco llegó al departamento... Lucas me estaba dejando poco a poco y yo me estaba sintiendo muerto en vida.

El lunes por la mañana llegó Lucas muy sonriente, yo solo tomé mis cosas y me despedí como siempre alborotando su cabello y me fui dejándolo sólo.

Ojalá haya desayunado con su novio por que yo no hice nada para comer.

Caminé hasta la compañía y entré como siempre, bajé a mi área y empecé a trabajar como todos los días.. aunque tenía un hueco aún más grande en mi corazón.

En la hora del almuerzo salí de la compañía y fui al muelle.. a mi padre le gustaban los barcos y los yates.. compré una flor blanca con unos globos blancos y me paré en la orilla.

Amarré los globos a la flor y las últimas lágrimas por mi padre salieron.

-Lo siento papá.. perdóname por no ser lo que querías... fui egoísta y cruel, fui un mal hijo al escojer mi felicidad y no la tuya, apesar de que me negaste y dijiste que yo morí para tí nunca te odié–Lloré y subí los globos, está era la única manera de despedirme de él. -Te amo papá.

Solté los globos y poco a poco subieron.. los miré irse y mi llanto fue desapareciendo. Era la única manera en que podía despedirlo ya que no quería ni que visitará su tumba.

-¿Te sientes mejor?–Dijeron en mi espalda.

Sequé mi cara y respiré profundo, volteé y asentí.

-Ven–Adán abrió los brazos y me sonrió.. lo pensé por unos segundos y sin más corrí a sus brazos.

Adán me abrazó muy fuerte, sobó mi espalda y sólo decía que todo ya estaba bien.. sería mejor si Lucas me dijera todo esto.

-¿Cómo llegaste aquí?–Pregunté sin separarme.

-Te seguí.. quería saber por qué estabas tan mal–Me dijo con una suave voz.

-¿Por que no me preguntaste?–Me separé y lo miré.

-Te conozco Ken.. no me dirías nada, pero ahora sé que le pasó algo malo a tu padre–Me dijo serio.

Empecé a caminar y él detrás mío.. poco a poco le conté la llamada con mi hermana y lo que él hizo el día que me fui del pueblo... dos horas... esa era la distancia que me separaba de la tumba de mi padre.

Volvimos a la compañía y Adán me acompañó hasta mi lugar de trabajo, se quedó unos minutos y luego se fue.

Seguí trabajando normal, gracias a Dios no había mucho trabajo y pude hacer bien las cosas.

Cuando Adán volvió ya era la hora de salida, subimos he hicimos lo mismo de siempre y me llevó a mi edificio. Me dijo que si lo necesitaba lo llamara a la hora que fuera.

Subí a mi departamento y me encontré a Sofía pero solo me miró mal y no me dijo nada.. la Ignoré y seguí mi camino.

Entré y Lucas estaba acostado sobre Max en el sofá de la sala.. ellos se separaron y me miraron, Lucas me sonrió pero Max escondió su rostro avergonzado.

-Hola Ken–Me saludó Lucas y se levantó de encima de su novio.

Asentí leve y con eso lo saludé.. no quería hablar por que sabía que rompería en llanto.

-¿Cenaremos ya?–Me preguntó y suspiré enfrente de mi puerta.

-Coman ustedes, estoy cansado–Entré y cerré con seguro.

Me quité el saco y dejé el celular en la mesa, me senté en la cama y suspiré, no quería llorar, ya lo había hecho lo suficiente.

Cuando iba a salir por agua me detuve cuando los escuché hablar.

-¿Que tiene tu amigo que está raro? ¿le molesta que yo esté aquí?–Esa voz infantil era de Max.

-No.. él es raro ignóralo, yo también lo hago aveces cuando se pone fastidioso, además su padre se murió el fin de semana y se siente mal–Dijo Lucas sin mucho interés.

-Mmm yo pensé que me odiaba, además la última vez me dejó muy claro que debo respetar este lugar–Seguía hablando de la misma manera y en forma de víctima.

-Yo también vivo aquí.. puedes venir cuando quieras, Ken a veces es un poco idiota con los demás.. nunca a sentido empatía por alguien diferente a mi y sólo está celoso–Lucas decía estas palabras con mucha tranquilidad que me causaba mucho dolor.

-Ok, además tu ya eres mío.. no quiero compartirte con nadie...

-Nunca lo harás, Ken es sólo un simple amigo tu eres mi novio y más importante.