Él Es Mi Todo [Yaoi, Bl](+18)

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Amaneció y sonó mi alarma.. suspiré y estiré mi mano para apagarla, me giré y Adán tenia el ceño fruncido con un leve puchero. Sonreí y se lo besé... él se removió y suspiró.

-Déjame.. debo ir a trabajar–Reí sueve cuando Adán apretó su agarre para no dejarme levantar.

-No.. otro ratito–Lloriqueó.

-Debes levantarte también, recuerda que Matías está aquí y debe ir a estudiar–Me senté y le mordí el labio que tenía abultado. -Apurate...

Cuando me soltó me levanté. Fui al closet y como era habitual saqué algo normal para mi y uno de esos fascinantes trajes para Adán, seguro hoy saldría con Leidy a divertirse como a ellos les gusta.

Fui al baño y me metí a la ducha con un poco de desaliento por que daba pereza ir a trabajar... me duche con el tiempo a mi favor, salí y viéndome al espejo utilicé el secador que Adán me había comprado para que no mojara el cuello de mi camisa. Sonreí al ver nuevos chupados y mordidas en mi cuerpo... la imagen de anoche me llegó a la cabeza y me reí, eso fue un poco raro.. aunque ecxitante pero no le quita el extraño gusto a Adán de la intimidad.

Salí y Adán no estaba pero la ropa si, fui y me puse lo mio viendo que me quedaba tiempo para bajar y hacer unas tostadas mientras dejaba la ropa sucia en el cuarto de lavado... tomé la canasta y salí de la habitación, cuando bajé el olor a comida llegó a mi, fui a la cosina y ahí estaba él cosinando con una sonrisa.

-Huele delicioso–Me le acerqué y le mordí el brazo.

-Oye.. aun no me puedes comer–Bromeó y me dio un casto beso. -¿Ya estás listo para comer?.

-Si, déjame y llevo esto al cuarto de lavado... además subiré a ver a Mati–Le di un besito y salí de la cosina haciendo lo que le dije.

Al subir al cuarto de Matías lo vi tratando de colocarse la corbata vinotinto de su uniforme.

-¿Te ayudo precioso?–Le pregunté y él me miró para asentir. -Vamos a bajar para desayunar.. tu lindo papi nos hizo el desayuno...

-Ujum, papá dijo que lo haría.. ¿quién me llevará al colegio?.

-Creo que tu papi, yo debo ir a trabajar–Le di un beso y él hizo un puchero.

-Pensé que te quedarías aquí como papá.

-No puedo hacerlo–Me levanté y tomé su manita. -Vamos a comer...

Los dos bajamos y en el comedor Adán ya tenía todo listo.. sentimos que la puerta se abrió y miramos viendo que Leidy entraba vistiendo una licra más un top, tenía puestos unos audífonos y sonreía grande.

-¡Buenos días familia!–Saludó animadamente al quitarse los audífonos.

-¿En qué momento saliste de casa? te hacía roncando como marranito–Adán le dio un beso en la mejilla.

-Hace una hora.. debo hacer ejercicio papá, mi cuerpo de reina no se hace solo–Ella sonrió enorme y me dio un beso en la mejilla. -Desayunen sin mi.. me bañare y tomaré mi tiempo...

La dejamos ir y nos sentamos a comer, no me demoré mucho por que debia tomar el transporte y eso era demorado... Adán se encargó de la losa y yo subí por mis cosas a la habitación.

-Llevate mi auto... así puedes venir a almorzar–Adán tenía las llaves en el aire.

Sonreí y las tomé.. le abracé el cuello y lo empecé a besar. Sus manos pararon a mi cintura e hizo presión hacia su miembro.

-Ahora no, debo trabajar–Le susurre al separarme.

-Que te valla bien–Me dio un casto beso y me abrió la puerta.

-¿Seguro no necesitas el auto?–Le pregunté.

-Segurisimo, la ruta de Matías pasa por aquí por los hijos de los vecinos–Adán me sonrió y tomó mi mano para darle un beso. -No me extrañes tanto...

-Deja tu ego–Me reí y me fui.

Me subí en el auto de él y empecé a conducir lejos de casa.. no podía borrar la sonrisa de mi rostro, aunque Lucas no salía de mi cabeza debía aceptar que mi presente y mi futuro es y será Adán.

Llegué a la empresa e hice lo mismo de siempre.. fui a mi lugar de trabajo y Tania ya estaba ahí revisando todo.

-Buenos días Tania–Saludé.

-Buenos días, ¿no te quitaron la pierna tamprano?–Ella me miró con una sonrisa.

-El tráfico.. además solo fue un minuto–Miré mi reloj y suspiré para sentarme en mi escritorio.

-Ken me dijeron que eres muy buen amigo del vicepresidente Adán–Ella comentó como si nada, la miré por que últimamente sólo quería hablar de él.

-Llevas semanas diciéndome lo mismo Tania–Suspiré y abrí mi correo buscando pedidos de los otros departamentos. -¿Ahora que quieres?.

-Crees que si invito al jefe a una fiesta él irá? –Ella me miró con una leve sonrisa. -La otra semana cumplo mis 24 años y quiero hacer una gran fiesta.. si quieres ir puedes hacerlo..

-Si tu le dices fiesta a Adán él solo pregunta ¿cuando?–Sonreí al imaginarlo. -Así que sería muy probable que acepte...

-¡Genial! ... talvez ahí pueda lograr seducirlo–La miré seriamente por lo que dijo. -Es que a pesar de su edad se ve tan sexi.. no sé que tienen lo hombres mayores que me vuelven loca...

-No puedes tener nada con él–Le dije serio y empecé a organizar un archivo que había pedido contabilidad.

-¿Por qué?–Preguntó confundida y se me paró frente al escritorio con los brazos cruzados. -Yo que sepa él está divorciado..

-Pero no sólo–Sentía como la sangre me hervía solo de imaginarme a ella encima de Adán. -Así que aléjate de él..

-¿Él tiene novia y no me habías dicho?–Preguntó indignada.

-Primero no somos amigos para tener la obligación de decirte eso–La miré y estaba enojada. -Segundo no puedo hablar de la vida de otros así por que si... y tercero Adán no tiene novia, tiene novio y soy yo, además nos casaremos y no me gusta que estés de ofrecida cada vez que viene a verme....