Capitulo 11: Otro paso

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Fan Wenfeng ya sabía que Ren Zhouyuan se había unido al equipo arqueológico, pero estos detalles eran cosas que había escuchado por primera vez. No pudo evitar sentirse un poco aturdido.

Era consciente de que el pasado de Ren Zhouyuan era difícil, especialmente cuando lo había conocido por primera vez. Sin embargo, no se dio cuenta de que solo era la punta del iceberg. Ahora, al ver al hombre sentado frente a él que tenía una cara indiferente y un tono claro mientras hablaba de estos asuntos, de repente sintió que su corazón se apretaba de manera insoportable. Quería tomar el lugar de Ren Zhouyuan y enseñarles una lección a esos ancianos.

Preguntó: "Entonces, ¿renunciaste al equipo arqueológico después? ¿Les has dejado intimidar a padre e hijo?"

Ren Zhouyuan ayudó a An-An a limpiarse las comisuras de la boca. Se encogió de hombros: "¿Qué más podría hacer? Yo era solo un niño en aquel entonces, apenas fuera de la sociedad. Todavía no tenía ninguna previsión. Me preocupaba que no me dieran dinero desde que me fui a mitad de camino. Pero tal vez se sintieron mal, así que no dijeron mucho cuando me fui ".

Recordando esos días en el pasado, Ren Zhouyuan negó con la cabeza y sonrió. Afortunadamente, saltó de ese lugar. Después, tuvo la oportunidad de conocer a Fan Wenfeng. Su vida también mejoró en cierta medida. Finalmente pudo confiar en su propia capacidad para trabajar duro por todo lo que poseía actualmente.

La inesperada declaración de An-An hizo que Ren Zhouyuan prestara atención a este problema una vez más. Creía que dado que estas cosas ocurrieron hace tanto tiempo en el pasado, An-An ya se había olvidado de ellas. Sin embargo, no esperaba que el daño de un momento en realidad trajera un impacto que no se pudiera borrar fácilmente.

Fan Wenfeng le sirvió una taza de té y dijo: "Esas cosas infelices, no hablemos más de ellas y mejoremos el tiempo presente". Pensó por un momento y luego dijo. "Pero el asunto de An-An, tienes que pensarlo cuidadosamente. Él no puede pasar toda la vida viviendo ... así."

Ren Zhouyuan miró a An-An y lo vio obedientemente sosteniendo sus palillos mientras comía algunos vegetales.

Nunca pensó que era necesario que distinguiera si su hijo era chino o extranjero. Pero tenía que decir que asimilaba demasiado a An-An. Su rostro era 99% el de un extranjero, pero hablaba mandarín con fluidez, aunque a veces decía algunas palabras que harían que Ren Zhouyuan se sorprendiera. Desde la infancia, nunca sostuvo un cuchillo y un tenedor, en vez de eso usaba palillos de manera consistente.

Originalmente pensó que esperaría a que An-An crezca lentamente antes de dejarle saber, naturalmente, cómo distinguir estas palabras. Sin embargo, parecía que el tiempo para guiarlo se había retrasado a una fecha anterior.

Los dos hombres hablaron un poco más, haciendo que este asunto pasara. Fan Wenfeng hizo algunas preguntas sobre el trabajo reciente de Ren Zhouyuan. “La última vez, dejaste tu empresa anterior para cuidar de An-An. Tu compañía ahora es realmente buena ". Hizo una pausa y luego dijo:" Esta vez, es posible que te quedes un poco más, ¿verdad? "

La mano de Ren Zhouyuan que sostenía un vaso de agua se detuvo. Tomó un sorbo y luego lo dejó. "Vamos a hablar de esto otro día, ¿de acuerdo?"

Su corazón siempre había estado preocupado. La tranquilidad del presente siempre le dio un inexplicable sentimiento de ansiedad. Especialmente cuando conoció a Leonid en la compañía, este tipo de malestar se volvió aún peor.

Sin embargo, había pasado un tiempo desde que comenzó a trabajar. Leonid no estaba presente en la compañía a menudo como había preguntado antes. Escuchó que dos veces cada tres días, el jefe tenía que ir de viaje de negocios. Después de la primera visita de An-An a Vichy, no tuvo que preocuparse mucho por una situación en la que fue descubierto. Le tranquilizaba.

Bringing along a ball and hiding from foreign devils Where stories live. Discover now