Soy Uchiha [ Naruto Fanfic]

S.T. [32]: ¡Uchiha Madara!

La piel verdosa de Obito se desprendió dejando a un chico normal, con la mitad de su cuerpo de color blanco, cayó al suelo produciendo un gran estruendo.

Naruto, Sasuke y Kanna aterrizaron en el suelo también. Una sensación de calidez tomó el cuerpo de la última cuando se acercó a los Bijuus. Las bestias la miraron enseguida y entendieron quien era ella para ellos, pero simplemente guardaron silencio dejándola pasar.

Tenían prohibido hablar con ella, por ahora.

Kanna los miró a todos, sintiendo una extraña conexión. Pero pasó por alto todo eso, no era momento de averiguarlo. Debía eliminar la amenaza ahora que al fin se debilitó.

— ¡Cumpliste tu promesa, Uzumaki Naruto! — le dijo el Yonbi.

— ¡Sí, Son!

Los demás bijuus también le agradecieron y lo felicitaron, menos Shukaku que era demasiado orgulloso para doblegarse por un humano.

Naruto estaba entretenido que no se dio cuenta cuando los Uchiha blandieron sus espadas dispuestos a matar a Obito.

— ¡Esperen, Kanna-chan, Sasuke!

— ¿De qué hablas? Es nuestra oportunidad —respondió Kanna aumentando su chakra en su espada de chidori.

— ¡Sí, pero.... Kanna-chan!

Se detuvieron abrupta mente cuando encima de Obito apareció alguien más, apuntándolo con un kunai. 

— Kakashi.—  nombraron al mismo tiempo, retrocediendo.

— Chicos, ya se los contaré después... Lamento aparecer de repente, pero dejen que me encargue de él, como antiguo compañero suyo.— elevó su mano con el kunai dispuesto a clavarlo en el cuerpo de su ex-compañero.

— ¡Kakashi-sensei, él ya está...! — Naruto exclamó, y una mano detuvo al peliplata a centímetros de tocar el cuello de Obito.— ¡Papá!

— Obito, cuando nuestros chakras estaban tirando nos mostraste tu corazón. Parece que tuviste una buena charla con mi hijo, supongo que sacó eso de su madre. — miró a Kakashi.— Pero en realidad, ese debería haber sido tu deber. Si hay alguien que de verdad comprende a Obito, que puede decirle algo... debes ser tú, Kakashi, su amigo.— el nombrado bajó su cabeza con tristeza.— Eso es, Naruto.

El rubio miró a los Uchiha comprendiendo el mensaje de su padre.

— Naruto, ustedes y la Alianza vayan a apoyar al Primer Hokage. Hay que sellar a Madara.

— ¡Ah! ¡Es verdad! ¡Aún está libre! — empezó a correr, adelantándose.— ¡Vamos, Kanna-chan, Sasuke! 

Naruto corrió por el árbol del Tsukuyomi hasta llegar a la cima y realizar su Odama Rasen Shuriken con la ayuda de dos clones creando una gran luz desde lo alto representando la esperanza de una batalla casi ganada a todos los de la Alianza. Lanzó su técnica hacia Madara.