Parte 7

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Un día antes.

David.

20 cervezas más tarde.

— U can't touch this —y comienzo a bailar al estilo MC Hammer, sólo me faltan los pantalones abombados —Yo I told you Can't touch this,
Can't touch this (oh-oh oh oh oh-oh-oh)
Can't touch this (oh-oh oh oh oh-oh-oh) —todos comienzan a aplaudir y a gritar sobre la mesa.

O es mi imaginación.

No, no lo es, definitivamente soy todo un rapstar.

—El fue Patricio Schmitt, señores —habla el hombre con canas que acaba de quitarme el micrófono.

—Yo soy Patriccccio... Schmittttt —levanto las manos y todos gritan golpeando las mesas con sus manos.

—Al parecer tenemos un ganador —agrega el señor del bigote —Patricio Schmitt —maldita sea gané, tomo el micrófono nuevamente mientras bigotes me da alguna cosa plástica en la que vomitaré luego.

—Muchas gracias —apenas logro articular —agradezcco estte premio a ttodos, deszeara que esto fuera la película de la chica que se muddda de África, para romperlo en pedazzoss y darle un trozo de plástico a cada uno —el hombre me quita el micrófono y golpea suavemente mi hombro.

—Patricio Schmitt —todos gritan, aplauden y chifletean.

Maldita sea, dejaré revistas Anderson para hacerme cantante bajo el pseudónimo "Patricio Schmitt".

Me bajo del escenario de un salto, mis piernas flaquean pero me aferro como piojo de un hombre moreno parado casi a la par mía, él esboza una amplia sonrisa con una ceja enarcada, me suelto rápidamente y trago saliva; acomodo mi saco y camino como todo un macho alfa, pelo en pecho, lomo plateado, espaldar de gladiador, barba de leñador... okay no, pero sí, soy cien por ciento hombre.

Al llegar a la mesa que está la castaña que me hace compañía, de inmediato se abalanza hacia mí.

—Erezzss un malditooo buenazooo para el cantooo —me besa, correspondo ese beso de la forma más caliente posible.

—Me encantaaan esozs labbios —toco esas cosas jodidamente preciosas con mi dedo índice.

—A mií me encantazs tú —presiona su dedo índice en mi pecho y yo como que me enciendo. De inmediato da la vuelta y mis ojos se van por otro lado; la verdad, no sólo me encantan sus labios.

—Messzzero —llamo a un hombre vestido de pingüino que pasa a la par mía —tráaigamme una botella de vodddka para celllebrar mi vvvictoriaaa.

Me siento frente a ella y la miro fijamente, sus lindos ojos castaños me miran con intriga ¡Joder! Esta mujer es preciosa, soy el jodido Patricio más afortunado de este mundo.

Recién Cazados © (Borrador de la 1era edición)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora