Could be...

Capítulo 31

Keiler's POV.

-Estoy bien Tyler.- dije cuando iba a tomarme en sus brazos para entrar a casa. Se apartó. Con un poco de dificultad caminé hacia adentro. La pierna me dolía demasiado pero intentaba aparentar que estaba todo bien y los golpes en mis costillas no me daban tranquilidad.

-Tengo que ir donde Bert, ¿te molestaría que venga luego?.- preguntó.

-Claro que no, pero... ¿Puedo ir contigo?.- sonreí. Me aburría estar en casa y ahora me traía recuerdos que quería olvidar.

-¿segura? ¿No te duele nada?.- se acercó a mi.

-No.- mentí.

-Vamos entonces.- sonrió tomándome la mano. Ambos salimos y nos dirigimos hacia Bert.- se que te duele la pierna, no tienes porque mentirme a mi.- me dio una mirada rápida mientras conducía.

-Es soportable, no quiero preocuparte.- respondí.

-me preocupa más que no me digas.- dijo tomando mi mano. Solté un suspiro.

-Esta bien, lo siento.- me disculpé dejando caricias en su brazo. Sonrió.

-Vamos.- habló cuando llegamos. Ambos bajamos del coche para entrar al lugar. 

Tyler tocó el timbre de la casa de Bert y al rato después la puerta se abrió.

-Hola chicos.- le dio un apretón de manos a Tyler y dejó un beso en mi mejilla. Luego pasamos.- Keiler, estuve revisando los papeles que me diste, creo que es una buena idea lo de ir a Rusia.

-Yo creo que Keiler ahora mismo no esta en condiciones para ir a Rusia.- comentó Tyler. Tenía razón.

-De todas formas Dmitry no volverá a Rusia, quiere el "Archivo A" y sabe que lo tenemos.- hablé.

-No tenemos nada respecto a sus ubicaciones, teléfonos ni computadoras, tengo archivos antiguos de sus estadías en California, pueden darnos algunas pistas pero nada seguro. Vengan.- lo seguimos hasta una habitación subterránea que tenía en su casa.

Al abrir la puerta estaba lleno de archivos, y una pizarra en una pared. Me acerqué. Habían fotos de todas las personas que se buscaban. Había una foto de Anthony, si Bert se enteraba que este me estaba ayudando iría por él y no me arriesgaría a ello.

Luego de que nos pasara todos los papeles volvimos arriba, nos despedimos y nos fuimos.

-¿Tienes hambre?.- preguntó. No comía desde que salí del hospital, eso fue hace unas 5 horas.

-Sip.- respondí.

-¿qué quieres comer?.- preguntó.

-Hamburguesa.- sonreí como una niña pequeña.

-Hamburguesa será.- dijo riendo. Condujo hasta Dino's y pidió dos ordenes de hamburguesa más papás fritas, nuggets y bebida.

De camino a casa íbamos riendo y comiendo, en más de una ocasión sentí que lo que había comido casi se me escapa por la nariz.

-Pasaré a mi casa primero, me quedaré contigo.- avisó cuando paramos frente a una casa que no era la mia.

-Por mi no hay problema.- respondí con una sonrisa.