Could be...

Capítulo 16

Keiler's POV.

"¿Qué haces cuando un capítulo termina? ¿Cierras el libro y nunca lo lees otra vez? ¿A donde ir cuando la historia terminó? puedes ser la que eras o la que te convertirás. Si todo sale mal... Solo aguanta"

Quisiera volver todo este jodido tiempo atrás, tal vez así evitaría todo esto que ocurre ahora. Hay cosas que nadie puede ver pero que están frente a los ojos, cosas que simplemente se van al pasar del tiempo o tal vez permanezcan para siempre o hasta que su tiempo termine. Las cosas pasarán porque tienen que pasar, "todo está escrito" suelen decir. La tierra gira y no lo podemos evitar, el sol sale y se esconde, tampoco lo podemos evitar. Pero no todo termina, lo hace cuando finalmente des tu último aliento. 

-¿No te comerás eso rubia?.- levanté mi vista a la chica que estaba en la celda de al lado. Debía tener unos veinte o más. Tampoco es que me interese. Arrastré la bandeja con comida hacia ella sin importarme si derramaba algo o no.- Que humor.- susurró tomando la comida. 

Me volví a sentar en la incómoda cama, tampoco esperaba una suite acá adentro después de todo. No tenía apetito a pesar de que no he comido nada desde hace dos días, en este momento lo único que me apetecía era una botella de algo fuerte, pero como saben, aquí no tendré lo que deseo. 

-Tienes visita Warren.- dijo Walter. Pasa tanto tiempo vigilándome que hasta he pensado que quiere ser mi amigo. No sería malo tener un amigo policía aquí. 

-Wuuju que emoción.- dije con sarcasmo, me levanté y caminé hasta aquella jodida sala.- ¿Qué haces aquí James?.- pregunté en un suspiro al verlo ahí. No los había visto desde hace dos días, en el instituto.- Si vienes a darme la charla, ya me la dieron.- hablé. 

-¿Cuando empezaste con esto?.- Preguntó ignorando mis palabras. Solté un bufido.

-eso que importa James.- dije.

-¿Fue después de que me fuera?.- preguntó. Joder, ¿por qué es tan insistente con esto. 

-Si James fue después, si viniste a interrogarme me voy, adiós.- Salí de la sala sin mirar atrás. Estaba cansada de sus preguntas, "¿por qué lo hiciste Keiler?" "¿Cómo pudiste?" "¿Estás sola en esto?" ESTOY CANSADA JODER!

-¿Te dejó el novio rubia?.- preguntó con una risa la misma chica de hace un rato cuando entré a mi celda. Tensé mi mandíbula y me acerqué a ella, entre las rejas estiré mi mano tomando de su pollera y la acerqué haciendo que se golpeara con los fierros.

-Cierra tu jodida boca, ¿oíste?.- hablé enojada. Luego la empuje. Me senté nuevamente en la cama. 

He estado buscando respuestas a lo que Mike hizo, en su juicio solo me delató a mi, no dijo nada más, ni de Frank, Christopher o Jasper. Solo mi nombre salió de sus labios. Ahora tengo a todo el FBI investigándome. 

-Eh Walter, ven aquí.- lo llamé. Dejó lo que estaba haciendo y se acercó.-¿Cuando puedo hablar con Mike?.- pregunté. Él rió. 

-No puedes.- dijo para volver a lo que hacía. Bufé. Idiota.

-¿puedes pasarme un lápiz grafito y una hoja?.- pregunté. Este frunció el ceño y me pasó lo que pedí. Me acomodé lo mejor que pude y comencé a trazar lineas en el papel. 

-Es hora Keiler.- dijeron. Me desconcerté de lo que hacía y lo guardé bajo el colchón de la cama. Me levanté para dirigirme a lo que decidiría el tiempo que pasaría aquí. Que definitivamente no será poco si tienen las pistas necesarias. 

-¿es necesario?.- pregunté cuando puso las esposas en mis manos.

-Contigo si.- respondió Walter. Bastardo.