d i e c i s é i s

53.2K 4.8K 3.4K
                                    

Lo único que hubo al salir de la estación de tren de Daegu fue silencio. Fue demasiado extraño para ser verdad. Yoongi se quedó parado antes de cruzar la carretera, mirando con los ojos muy abiertos todo lo que le rodeaba. Sus pupilas se agitaban y su mirada era incapaz de fijarse en una sola cosa, objeto o persona. Hoseok y yo le observamos, sin decir nada. Yoongi debía de estar sintiendo muchas cosas a la vez al ver lo cambiadas que estaban las calles de Daegu. Si no me equivocaba y no recordaba mal, la última vez que Yoongi había pisado las baldosas su ciudad natal fue cuando tenía catorce años, lo cual quería decir que llevaba casi diez sin ir a Daegu.

Hoseok, después de unos cuantos minutos parado al otro lado de la carretera, sin gritar -sorprendentemente-, me habló de la forma más discreta que pudo, serio.

- Bueno, ¿y cuál es el plan?

Le miré entre ofendida y desconcertada, girándome como una ardillita asustada. - ¿No lo habías pensado tú todo?

- Eh... Sí, pero me refiero a qué vas a hacer con Yoongi cuando hables con su abuelo. No vas a preguntarle sobre su nieto con él delante, ¿no?

Abrí la boca, comprendiendo al fin lo que quería decir Hobi. Él sabía que iba a Daegu principalmente para hablar con el abuelo de Yoongi. - Hablé con el señor Min ayer. Mi plan es que lleves a Yoongi a algún lugar. No sé, pídele que te haga un tour por Daegu, o algo. Sólo distraelo. No quiero que decaiga más...

- Sus deseos son órdenes, señora. - Soltó, fingiendo ser un soldado. Me reí, y seguidamente, Hoseok dio un grito para llamar a Yoongi, que hizo una de sus típicas muecas de odiar al mundo. - ¡Vamos, guíanos por esta preciosa ciudad!

Yoongi llegó a nuestra altura con paso cansado. - ¿Dónde queréis ir?

- Esperaba que tú quisieras ir a algún lugar en especial. - comenté.

- Vale: primero, vamos a visitar al abuelo de Suga; luego vamos a comer a alguno de los restaurantes que he ojeado por internet y damos un paseo. ¿Correcto? ¡Correctísimo, chicos! - Hoseok no nos dejó responder. Fue más bien una pregunta a sí mismo. - Min Suga, orgullo de Daegu, ¿sería usted tan amable de guiarnos a la morada de su abuelo?

- No me acuerdo muy bien del camino..

- ¡Mientes! - Hoseok le cogió por los hombros y empezó a empujarle hacia delante con una de sus sonoras carcajadas. - ¡Venga! ¡Yoongi, te elijo a ti!

- No soy un puto pokémon.

- ¿Os busco un cura para que os case? - bromeé, unos cuantos pasos por detrás de ellos. Me reí, tímidamente, y me encogí de hombros ante la mirada asesina de Yoongi.

Me limité a ver cómo los dos discutían el resto del camino. Bueno, ''discutían''. Yoongi protestaba a la par que fumaba su segundo cigarro del día mientras Hoseok, nuevamente emocionado por la aventura, le gritaba a sus espaldas. Caminamos unas cuantas manzanas hasta alejarnos de la estación. Hobi le preguntó que por qué no habíamos cogido uno de los buses que paraban cerca. Yoongi contestó que iríamos andando por la sencilla razón de que quería fumar. Y sin más, casi al acabar el segundo pitillo, sacó y se fumó un tercero.

Debía de estar bastante ansioso, aunque aspiraba el humo con lentitud. Prestaba atención a cada esquina, a cada ladrillo, a todo lo que se encontraba a su alrededor. En sus ojos pude ver una chispa esperanzadora de ilusión. Estaba segura de que a Yoongi le entusiasmaba volver a su ciudad después de tanto tiempo. Debía de tener morriña por su queridísima Daegu. Verle observar los alrededores me hizo pensar que no habíamos hecho el viaje en vano. Tenía la corazonada de que iba a mejorar bastante a pesar de que la visita sólo iba a durar dos escasos días.

Hold me tighter (HMT2)  » Suga;BTS✔Where stories live. Discover now