Capítulo 33.2: El amor puede lastimar

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"Querido diario, hoy empiezo una nueva vida y un nuevo diario. Ya no será nunca más una potrilla, ¡Ahora finalmente soy una adulta hecha y derecha! ¡Hoy finalmente me fui de la casa de mis padres y alquilé mi primera casa para mi sola!

Es una pequeña pero espaciosa casa no muy lejos del centro de Ponyville, pero lo suficientemente alejada como para tener algo de tranquilidad. La dueña me dijo que si todo sale bien podrá vendérmela en un año, ¡Eso es lo que espero de todo corazón! ¡Una vez sea mía podré transformarla y convertirla en la Boutique de mis sueños! ¡Lo espero con ansias!

...

Llevo varios días viviendo sola. A veces quiero arrepentirme de lo que hice y volver con mis padres... ¡Cielos! Si tan solo no fuera tan insegura de mi misma. Supongo que seguiré ocultando mi inseguridad bajo mi máscara, así nadie se preocupará por mí... ¡Oh! ¿Acaso no lo sabes querido diario? Claro que no, eso lo escribí en mis otros diarios, así que no sabes nada sobre mí. Tendrás que ponerte al corriente poco a poco, por ahora solo te diré que la Rarity que todos conocen no es la verdadera Rarity, o al menos no es como me siento conmigo misma siempre.

Es difícil de decir, pero supongo que tendré que contártelo querido diario...

De potrilla siempre fui una potrilla muy insegura. Con mis padres viajando por toda Equestria, siempre me costó sentirme querida o valorada, incluso en la escuela. Le temía a mis compañeros, acercármeles y conversar, pensando en que no les agradaría. Así fue como pasé mi primer año de escuela, hasta que conocí las revistas de moda.

Sé que si pudieras reírte, te reirías, pero es la verdad. Un día una amiga de mi madre trajo consigo una revista de modas de Canterlot. En cuanto la vi, de inmediato quedé impresionada por dos cosas: los hermosos vestidos que usaban las modelos, y por las mismísimas modelos, con expresiones elegantes, hermosas, seguras de sí mismas mientras todos los ojos se giraban para verlas y admirarlas.

Ese día tomé la revista y la leí una y otra vez, ¡Allí fue cuando nació mi pasión por la costura y el diseño! Fue la primera vez que pensé en ser diseñadora. Sin embargo, también me percaté de algo, ¿Quién le prestaría atención a una diseñadora insegura de sí misma? La respuesta era obvia, nadie. Fue entonces que decidí cambiar, actuar diferente, moverme diferente, hablar diferente, volverme más segura de mí misma, y no había nadie más segura de sí misma que las modelos de las revistas. Así fue como mi segundo año de escuela llegué con una renovada actitud.

Aún recuerdo aquel día, todos mirándome extraño, todos murmurando de lo rara que era luego de mi súbito cambio de actitud. Aquello hizo que todos mis temores volvieran, lo único que quería hacer era salir huyendo, pero me mantuve firme, mantuve mi fachada aunque mis piernas temblaran y mi estómago se revolviera. Así fue como todos en la escuela poco a poco fueron aceptando a la nueva Rarity, una Rarity más sociable, femenina e incluso algo coqueta, tal como las prestigiosas modelos de la capital. Y mientras esa Rarity crecía, la Rarity insegura iba ocultándose en lo más profundo de mi ser, pero claro, ella jamás desapareció, después de todo no puedes deshacerte de tu propia escencia...

En fin, basta de nostalgia por hoy, querido diario. Por ahora solo te basta saber que la Rarity que todos conocen es mucho más insegura de lo que todos creen, pero mientras nadie lo sepa, todo estará bien, solo tú lo sabrás, después de todo mi alma necesita con quien desahogarse, aunque sea solo con un libro.

...

En ese instante la magia de Rarity movió varias páginas hacia adelante para que Dusk continuara leyendo.

"Querido diario... Solo hablo contigo.

Pensé que mi infancia en soledad me prepararía para vivir sola, pero no. Día tras día, semana tras semana, mes tras mes, vivir sola me aterra. Sé que soy una yegua adulta, pero no puedo evitar sentirme como una pequeña potrilla cuando estoy sola.

Dusk Shine en busca de la felicidadWhere stories live. Discover now