In The Shadows | Choso (Adapt.)

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Canción: Mirror - Lil Wayne ft Bruno Mars

8:20pm

Después de su visita al cementerio, Kamo había decidido ir a un pequeño bar. El establecimiento se localizaba a las afueras de la ciudad, debido a que era muy poco conocido. Así evitaría encontrarse con gente que lo estuviera buscando.

Se encontraba sentado en un banco alto, recargado en la barra del bar. Sostenía un vaso con vodka en una mano, mientras que con la otra sujetaba su dispositivo móvil, aún seguía viendo la fotografía de Alice en la pantalla, era en lo único que estaba concentrado.

—¿Puedes prepararme un Martini? —preguntó una voz femenina, llamando la atención del bartender.

—En un momento, señorita —respondió el hombre, alejándose de la barra con la intención de preparar la bebida solicitada.

La mujer tomó asiento al lado de Choso, no pudo evitar mirarlo de reojo, pues había capturado su total atención desde que lo vio ingresar al bar.

Miró el celular que él tenía en sus manos: había una foto de una chica en su pantalla.

—¿Novia o esposa? —cuestionó la mujer con total intriga. Choso al escuchar eso, decidió bloquear su celular, dejándolo en la barra y tomando su vaso de vodka.

—Novia —mencionó seguro de su respuesta y sin voltear a verla. Movió su vaso un par de veces antes de darle un sorbo.

—Aquí está su Martini —el bartender regresó segundos después con el cóctel preparado y dejándolo frente a la mujer. Una vez que el sujeto se marchó, ella decidió seguir hablando.

—Así que... ¿Novia? ¿Eh? —pronunció en tono relajado. Se había dado cuenta que no mentía ya que él no portaba alguna sortija en la mano—. Eso no es un problema para mí.

Choso rió levemente al escuchar la contestación. En años pasados, esa insinuación no le hubiese molestado, ya que Kamo no tenía que esforzarse ni un poco, para conseguir una mujer... le llegaban solas.

—¿Ah, no? —cuestionó burlón, a la vez que metía la mano a uno de sus bolsillos traseros del pantalón.

—¡Para nada! —respondió sonriente. La mujer acarició el brazo de Kamo, sin molestarse en ocultar sus verdaderas intenciones con él—. Es más... —ella se dio la vuelta en el banco, haciendo que su espalda quedara recargada en la barra, logrando ver de frente a Choso—. Puedes imaginar que soy ella.

Desde ese ángulo, pudo apreciar de cerca cada facción del hombre, era sumamente atractivo. Ella había estado con infinidad de japoneses, pero nunca antes había visto uno tan fascinante como este. De solo pensar en conseguir una noche con él... le provocó un leve cosquilleo en su entrepierna.

—Te lo dije antes... —pronunció Choso una vez que había logrado sacar su billetera, de la cual tomó varios billetes de alta denominación—. Tengo novia.

Kamo se levantó del asiento, acercando el vaso a sus labios. De un gran trago se bebió el contenido de este, dejando el vaso vacío en la barra.

—¿No puedes pasar una noche conmigo solo por que tienes novia? —preguntó la mujer, siendo directa. Notó que él tenía la intención de irse, así que mejor fue directo al grano.

Choso le hizo una seña al bartender, indicándole que dejaba el dinero en la barra y señalando que pagaba tanto su bebida... como la bebida de la mujer.

—No quiero, es diferente —contestó Kamo mientras guardaba su billetera y tomaba el celular—. Que pases una buena noche, linda —mencionó él, siendo cortés—. Yo invito —la cantidad de dinero que había dejado, era la suficiente como para ponerse bastante ebrio.