El multiverso de FNAF

Selena Terrence (historia conectada con la de "Post-SB")

Un día más del montón en la monótona vida de la joven adolescente peli rubia... Molestada por los rayos de luz provenientes del recién salido sol, la chica se vio obligada a levantarse de su cama y comenzar el día aún somnolienta. Se sentía cansada, sin fuerzas, como si la noche anterior le hubieran dado una auténtica paliza. Definitivamente no estaba llevando bien esto del año nuevo. Hace una semana 2016 se fue dando paso al siguiente año, el 2017. Al principio se hizo creer a sí misma que ese sería su año, que su actitud cambiaría completamente y se volvería una persona muy productiva y trabajadora... Sin embargo, las cosas no parecían ir así... Pero hey, no debía de perder la esperanza, quizás en algún momento ocurriría ese cambio de manera abrupta y se volvería una adolescente responsable, educada y prestigiosa. Su madre siempre le decía que debía de ser eso, una persona madura, pero eso poco o nada le importaba a ella. Le gustaba ser rebelde, no atender las reglas de los adultos, su madre era estricta, y aunque la mayor parte del tiempo obedecía sus órdenes, habían unas cuantas ocasiones en dónde se quería pasar de lista y terminaba tomando opciones por sí misma. Y siempre esas opciones tomadas eran como un salto de fe: A veces salían bien, y otras veces salían mal... Todo era cuestión de suerte. Mientras se cepillaba los dientes, la fémina no podía parar de pensar en su madre... Era tan estricta y seria con ella... ¿Pero por qué? ¿Que clase de sucesos debió de vivir en su infancia para volverse una mujer así? ¿Quizás sus padres también eran estrictos con ella? Podía ser, pero... Era desconcertante, pues según la visión que tenía ella sobre sus abuelos, estos eran auténticos ángeles puros incapaces de sentir odio o ira por nada. ¿Como podían ser tan diferentes? Abuelos amables y tiernos... Siendo los padres de una mujer seria y amargada, demasiado irónico. Pero también podía haber una segunda opción: Quizá ella también se exigía mucho a sí misma en su adolescencia, y por eso es que ahora le exige tanto a su hija, para que llegue al mismo nivel académico que ella alcanzó alguna vez en su juventud. Pero de la misma manera que la opción anterior, saber si esta hipótesis era falsa o no estaba fuera de su alcance. Debido a que su madre casi nunca le contó nada sobre su infancia, lo único que le contó una vez fue que tenía una hermana mayor que, a la corta edad de 12 años, fue secuestrada en uno de los locales de Freddy's, y su cuerpo jamás fue encontrado. Solo de pensar eso le entraban escalofríos... Una tragedia ocurrida en una pizzería local cuyas víctimas jamás fueron encontradas... Parecía una trama digna de una serie de novelas centradas en el misterio y terror para adolescentes. Quizás si algún día se volvía escritora podría sacar un libro sobre eso, quien sabe, el mundo es un lugar lleno de sorpresas, y siendo ella una chica joven de tan solo 13 años que todavía no sabe ni de qué trabajar cuando sea grande, era comprensible que su mente le diera tanta importancia a esta clase de cosas...

Y entre tantos pensamientos, al final la adolescente no solo terminó de hacer sus actividades habituales para mantener su higiene, sino que también acabó por completo el desayuno que su tan querida madre había hecho con tanto amor y cariño. Con su plato ya vacío pero con algunas manchas de suciedad, la peli rubia colocó este mismo en el lavavajillas para que este terminase el trabajo por ella. Y con ello, ya había terminado todas las tareas que tenía para ese día... Día el cual se podría considerar como su "día libre". Sin escuela, sin molestias... La joven no hizo otra cosa mas que dejarse caer al blandito y suave colchón de su cama para disfrutar un poco de su ausencia de responsabilidades. Con el móvil en la mano, entró a las redes sociales para ver que cosas estaban sucediendo, a ver si todavía había gente haciendo su reto extraño sobre lanzar una botella y que se les quede de pie, o si todavía había gente jugando con esos juguetes tan extraños llamados Fidget Spinner o algo así. Era placentero estar así...

Sin preocupaciones...

Sin estrés...

Todo era perfecto, nada podía salir mal...

...

"¡Sal a la calle un rato y no estés todo el día encerrada en casa como una rata!"

Echada a la fuerza de su propia casa por parte de la madre que la parió, la joven ahora se encontraba en el exterior, tirada en el suelo, como un costal de papas sin vida

"¿Todo el día encerrada en casa como una rata? ¡Venga ya! ¡Que exagerada es esa mujer! Ni que fuera una niña rata"

Pensó la chica indignada mientras se levantaba del suelo con desgano, molesta por lo que su propia progenitora le había hecho en ese momento. Sin embargo, y antes de que pudiera seguir quejándose... Las inesperadas risas burlonas por parte de un niño a lo lejos llamaron su atención. Frente a ella, se encontraba un niño bastante... Atractivo, tenía el pelo rubio como ella, los ojos verdosos y en su mano derecha tenía una linda pulsera. Detrás de él, una horda enfurecida de niños iban a toda velocidad para capturarlo y cobrar venganza. El más grande del grupo, que parecía ser el líder, tenía la mitad de la cara manchada con pintura azul, cosa que, sumada a las constantes risas que hacía aquel peli rubio mientras era perseguido, hizo que la chica se pudiera hacer a la idea de lo que había pasado, y el por qué ese mocoso era perseguido con tanto esmero por aquel grupo. Pero por más que corrían, nunca llegaban a atrapar a ese granuja, parecía imbatible, como si fuese un auténtico cohete. Y tras un par de jugarretas y atajos tomados, el joven chico, que parecía tener la misma edad que nuestra protagonista, había conseguido burlar a sus acosadores, escondiéndose en un callejón lejos de su alcance

"Jaja, que fácil es escaparme de esos inútiles. La próxima vez que se metan conmigo, ya no solo les lanzaré un globo lleno de pintura a la cara, sino que haré algo más... No sé el qué, pero definitivamente haré algo más"

Dijo él victorioso limpiándose las manos y sonriendo satisfactoriamente por su victoria. Pero al darse la vuelta para marcharse de ahí... Su corazón se detuvo inmediatamente al ver la fémina que tenía en frente suyo

"Holi"

Saludó ella gentilmente con una expresión agradable en su rostro. Como si no hubiese perseguido a un desconocido por la calle solo por curiosidad

"Eh... Um... Ah... Bueno... Am...

(Um buen rato de puros tartamudeos tímidos más tarde)

Hola... M-Me llamo Eliot. Eliot Emily... Bueno, mis amigos y la gente solo le llaman Eliot porque... Emily es mi apellido, jeje... ¡En fin! Un gusto en conocerte..."

Respondió el Emily nerviosamente, estrechándole la mano a la chica con cordialidad y educación (y también muchos nervios)

"El gusto es mío. Me llamo Selena, Selena Terrence. Por cierto, ¿Que hiciste para que esa horda enfurecida fuera tras de ti?"

Y con una mirada fija, la chica sin saberlo estaba viendo y hablando con la persona que más adelante, en un futuro bastante lejano, se volvería su esposo...

Pero no por siempre...

...

"Y bueno... Ya está. Los papeles del divorcio ya están firmados, supongo que esto es un adiós..."

Siendo ya dos adultos maduros, casados y hasta con un niño, cualquiera pensaría que la relación estaría ahí para quedarse. ¿Verdad? Bueno... No. La falta de comunicación entre ambos debido al trabajo del varón provocó que ambos terminaran perdiendo aquella chispa de amor que parecía eterna. Y al final, tras bastante tiempo sin sentirse amor el uno al otro... Acabaron tomando la decisión que para ellos era correcta, y acordaron en divorciarse. Pero lo harían en buenos términos, no querían que su pequeño hijo sufriera...

No querían que su pequeño Clay se sintiera triste por su separación...