Vincent

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En una escuela pública de muy mala reputación, residía un pequeño niño diferente al resto. La mala reputación de la escuela no se debía a su educación ni enseñanza, si no a sus métodos y a los propios estudiantes de esta, los profesores solían castigar a los estudiantes con maltratos tanto físicos como psicológicos, pues varias veces cuando los alumnos se equivocaban, utilizaban reglas para azotar a los niños mientras les decían todo tipo de insultos, aunque esto en el siglo 21 sería motivo suficiente como para cerrar dicha escuela, en ese entonces las normas eran mucho más permisivas y dichas prácticas eran completamente legales. En esta escuela también se caracterizaban los alumnos delincuentes y ladrones, pues la mayoría de los alumnos, por no decir todos, tenían muy poca educación y eran realmente violentos. Pero entre todos estos, esta nuestro querido protagonista, un pequeño niño de no más de 11 años, el chico era muy inteligente, aplicado y educado, características que lo hicieron sobresaltar por el resto, haciéndolo rápidamente el favorito entre los profesores y maestros, opinión que obviamente los demás alumnos no compartían, pues ellos le tenían envidia y lo molestaban constantemente, burlándose principalmente de su gusto por el color morado y su tipo de cuerpo, pues el niño era bastante gordo y esto sumado a su gran intelecto y a que nunca se defendía de los abusos, lo hizo ser el centro de burlas en la escuela y el punto central para los acosadores, el niño simplemente aguantaba los abusos y nunca respondía, hasta que un día, todo cambió.

El pequeño niño de ojos grises, pelo castaño y cuerpo obeso, iba caminando por la calle en camino a su casa después de las clases, mientras tanto, pensaba en sus cosas relacionadas a los estudios y todas esas cosas que los chicos inteligentes piensan, el chico estaba por completo perdido en sus pensamientos, apenas y estaba lo suficientemente conectado con la realidad como para detenerse cuando veía que los semáforos estaban en verde. El chico pasaba por una aparentemente solitaria calle, o al menos eso pensaba hasta que escuchó una voz detrás suya

"¡Ho! ¡Un elefante rosa!"

Dijo un niño en tono burlón, el chico vestido de morado trató de evadirlo y de intentar ignorarlo, pero dichas acciones solo empeoraron más las cosas, pues el chico al ver que no respondía decidió molestarlo aún más

"¡He! ¡Elefante! Deberías estar en el zoo, no en la calle"

Volvió a decir el chico, y al ver que el castaño no respondió, comenzó a cabrearse, así que decidió dejarse de insultos e irse directamente al maltrato físico. El muchacho empujó al castaño haciéndolo caer al piso, solo para después darle un par de patadas en el suelo

"¿¡Me vas a responder ahora?!"

Gritó con furia mientras observaba como el niño se retorcía de dolor en el suelo por las patadas, el acosador por su parte simplemente le dio un pisotón en el cuerpo para después escupir lo y marcharse de ahí sin que nadie lo vea. El oji gris después de haber estado un rato en el suelo retorciendose por el dolor, decidió levantarse y continuar su camino hacia su casa, aunque él sabía que el llegar a casa tampoco era una garantía de salvarse de los golpes. Cuando llegó, vio la misma situación que de costumbre, el novio de su madre viendo la tele con varias botellas de cerveza a su alrededor tiradas, mientras que su madre, estaba preparando la comida en la cocina con su, ya habitual, cara de preocupación y sus grandes ojeras

"Ya llegué"

Anunció el muchacho con su ropa completamente sucia, el adulto giró su cabeza para mirar al muchacho, y al ver que traía la ropa sucia, dio un gruñido, se levantó y fue en frente de él, el chico ya sabía lo que le esperaba, así que cerró fuerte los ojos esperando el golpe

"¿Cuantas veces te he dicho que no vengas a casa con la ropa sucia?"

Dijo el adulto, y acto seguido, dio un fuerte bofetón a su hijo en la cara, causando que esta se volviese roja por el golpe

El multiverso de FNAFOnde histórias criam vida. Descubra agora