El multiverso de FNAF

La amistad prosigue

Y ahí estaba él, en su cama, con la mirada perdida en el techo, pensando en lo que le había ocurrido el día anterior

"Una... Una chica me defendió..."

Dijo él en voz baja sin poder creerse realmente que eso había pasado. No sabía qué le sorprendía más, que alguien lo haya ayudado, o que ese alguien sea una chica capaz de derrotar a una multitud de bravucones a la vez sin despeinarse. Y de pronto, mientras el muchacho se mantenía sumergido en sus pensamientos, un ruido lo llevó de vuelta a la realidad

"Evan... ¿Por qué tan pensativo?"

Preguntó una voz a su lado, era su peluche de Freddbear. Para Evan, este peluche era especial, podía hablar, tenía vida propia y hasta a veces se movía por su cuenta, nunca supo ni entendió de dónde provenían esas propiedades anómalas, pero de igual forma, eso poco o nada le importaba, pues ese peluche era su mejor amigo, el único en quien confiaba y con quien más secretos compartía

"Freddbear... Pasa que ayer me ocurrió algo que no me esperaba, una... Una chica me defendió de esos bravucones"

Respondió el castaño sorprendiendo así a su amigo hecho de tela y algodón

"¿Una chica? ¿Te defendió? Wow, que sorpresa, eso sí que no me lo esperaba"

Dijo el oso de color amarillo sin poder creerse lo que aquel chico le había dicho

"Sí... Y creo que también quiere ser mi amiga"

Complementó Evan haciendo que la sorpresa se convirtiera en alegría

"¿Una amiga? Por Dios, ¡que buena noticia! ¡Eso es excelente, Evan! Al fin tendrás a otra persona con la cual hablar sobre tus problemas"

Celebró el oso de peluche en un tono alegre. Pero, a pesar del optimismo que tenía las palabras de su amigo, Evan se mostraba indeciso ante aquel acontecimiento, ¿y si en realidad ella solo fingía? ¿Y si en realidad todo aquello era una broma de parte de aquella niña para luego ridiculizarlo en público? El chico había tenido muy pocas amistades en toda su vida, la única persona a la cual consideraba una amiga y que estuviese fuera de su familia era Charlie, a quien consideraba casi como una prima. Y el simple hecho de que una chica, lo defienda y lo trate bien así porque sí, lo dejaba cuando menos paranoico, pero nuevamente, cuando el muchacho ya se había sumergido en sus pensamientos, otro ruido lo acabó llevando se vuelta a la realidad

"¡Hey, Evan! ¡Aquí a fuera, Evan!"

Gritaba la niña de pelo negro a fuera del hogar de los Afton, en un intento por captar la atención del mediano de la familia. Al sacar la cabeza por la ventana, Evan se dio cuenta de que era ella otra vez, esa tal "Cassidy", quien montada sobre una reluciente bicicleta dorada

"¡C-Cassidy! ¡¿Qué demonios haces aquí?!"

Preguntó el chico en una mezcla entre asombrado, confundido y avergonzado. Asombrado porque aquella niña lo fuese a ver hasta su casa, confundido por el cómo podía saber esa niña dónde vivía él, y avergonzado por los posibles comentarios que haría su familia, sobretodo su hermano mayor, Michael, respecto a ella y él

"Ven, sal a la calle, hace un día espléndido y mi bicicleta puede cargar a dos personas a la vez, vamos, ven"

Respondió la niña invitándolo a salir. Y como era obvio, tal escándalo que provocaba no pasaría desapercibido para los Afton's

"¿Y esa quién es?"

Preguntó Elizabeth desde la ventana viendo a aquella niña peli negra, con su hermano mayor justo al lado

"No tengo ni la menor idea, pero, aparentemente conoce de algo a Evan... ¿Sabes lo que eso significa?"

Dijo Michael para después poner una sonrisa maliciosa junto a la menor