Flash, el camino hacia ti

69.- Una en dos

Kara Allen PoV

Espero que el tío Cisco no tarde, es un día importante, han pasado unos días desde que mamá tuvo la idea de separarse de tía Frost cómo Firestorm lo hace, la hija del profesor Stein la ha ayudado con ello, al igual que Lilith y Jaxs quienes se tomaron unos minutos de su lucha contra prófugos mágicos que se liberaron junto a Mallus para ayudarnos.

Anoche habían empezado a hacer los cálculos finales, y parecía que finalmente estaba todo listo, incluso usaron una gota de sangre en tejido clonado para intentarlo y el resultado fue ideal, un tejido obtuvo el ADN de mamá y el otro de tía Frost.

Se supone que hoy tendrían lista la máquina, pero justo hace unas horas Eva McCulloc llamo al tío Cisco para decirle que tenía algo que mostrarle del proyecto en el que hemos estado trabajando nanobots replicantes capaces de tomar la forma de nuestros trajes, autorepararse e igual de resistentes que los que tenemos.

Y no es lo único, tras hablarlo, acordamos que le daríamos a la Dra. Dawan los datos de la materia oscura para que los proyectara con su máquina y nos diera sus resultados, los analizariamos y en base a eso podríamos darle un poco solo para que se curara y quizá, si los resultados nos convencían podríamos canalizar al Dr. Rosso con ella para que juntos intentaran terminar el proyecto contra el cáncer.

— Sr. Ramón, Srta. Allen, los esperan en la sala 4.

La recepcionista nos deja pasar después de 20 minutos, supongo que tenían una junta importante, al llegar veo a una mujer salir del otro lado de la sala, creo haberla visto en algún lugar, pero no sé dónde.

— Cisco, perdona, hubo una emergencia de seguridad y mi jefa de seguridad no me dejó en paz, adelante, tomen asiento.

Eva es encantadora como siempre, nos ofrece café, negamos, ella toma uno negro muy cargado, hasta donde estoy puedo detectar el olor, tío Cisco pregunta si ha tenido alguna clase de avance, ella asiente, está por mostrarnos algo cuando nos interrumpen, un hombre se sienta al lado de Eva.

— Joseph, no sabía que vendrías.

— Mi esposa trabaja día y noche en un proyecto secreto, claro que quiero saber que es.

Así que ese es Joseph Carver, es raro verlo en persona Eva McCulloc siempre ha sido el rostro público de la empresa, salvo cuando tuvo ese accidente durante la explosión del acelerador que la dejo con esquirlas de vidrio en su cuerpo, tardo 3 meses en recuperarse.

— Ramón, supongo que esto significa que no has dejado de pensar en la propuesta, Eva no se impresiona mucho, y tú lo lograste.

— Muchas gracias Joseph, pero estoy bien donde estoy, además, estamos por reabrir los laboratorios.

Joseph asiente y le pide a Eva que continúe, ella saca un contenedor y al activarlo vemos como algo se comienza a formar en su cuerpo, una gabardina verde y dorado, una combinación muy rara, pero a ella le queda muy bien.

— Cómo pueden ver, los nanobots pueden ser programados para igualar las cualidades de cualquier tipo de tela, gamuza, fieltro, incluso piel sintética — supongo que también keblar — resisten grandes y bajas temperaturas, sin embargo, aún no logro encontrar una forma de que no se descarguen después de 8 horas de uso continuo, se necesita una fuente de poder más grande.

Tío Cisco y yo nos vemos, para nosotros estoy seguro que las muestras de estrella enana servirán, tío Cisco se acerca a tomar el  recipiente, pero Carver lo detiene, dice que aunque la idea fue suya se desarrollaron con tecnología de Carver tecnologis, por ende son suyo, Eva quiere protestar, pero una mirada de Carver la hace guardar silencio.

Mi tío me dedica una mirada y sé lo que quiere que haga, en realidad no es nada ilegal, esos nanobots salieron de mi mente y de mi tío, ambos diseñamos los esquemas, Carver solo los fabricó y añadió su tecnología replicante, uso mi velocidad y tomo uno de los frascos y dejo una llave en un puerto USB para que podamos recuperar y borrar nuestro trabajo.