Capítulo 32

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Nicola:

Veo como el auto de Dimitri se aleja y suspiro con una mezcla de alivio y anhelo. Cuando ella dijo que me diera la vuelta por un momento estuve tentado a hacerlo pero sé que aún no es el momento, no después de la nueva información que trajo el ruso.

Uno de los capos estuvo escarbando en los exámenes de ADN de los restos con los que supuestamente me identificaron, por suerte hay gente que con el incentivo correcto hace trabajos excepcionales así que no había nada de qué preocuparse pero el simple hecho de que estén cuestionando las cosas hace que tengamos que estar más alertas que nunca.

El movimiento de la noche anterior fue bastante arriesgado, incluso para mis estándares, pero no me arrepiento de nada. Sé que Sky es inteligente y si puede conectar las señales que he estado dejando todo estará bien. 

Durante el resto del día me mantengo alejado de la propiedad de Dimitri, mientras me divierto viendo como Sky intenta averiguar quién es Alexey. Mi mujer es bastante testaruda y cuando se propone algo no hay nada que la haga perder su objetivo.

Cuando ya es de noche me escabullo nuevamente en su habitación y la luz de la luna me permite ver su pequeño cuerpo bien acurrucado en la cama, por otro lado Matteo está muy despierto y cuando sus ojos con algo de dificultad se enfocan en mí enseguida agita sus manos.

—¿Me extrañaste, piccolo? —susurro, mientras que con cuidado lo saco de la cuna y lo acurruco en mis brazos— Muy pronto estaremos juntos los tres y no nos separaremos nunca más, lo prometo.

Juguetea con las mangas de mi camisa y lo dejo divertirse. A pesar de que biológicamente es mi hermano se convertirá en mi hijo. No permitiré que tenga algún tipo de infancia jodida, además Skyler ya lo aceptó como suyo y no tengo ningún problema con ello. 

Con Matteo aún en mis brazos me acerco un poco a la cama y con extremo cuidado acaricio su brazo, es solo un bequeño toque pero mi cuerpo reacciona enseguida, la he tenido lejos tanto tiempo que ya se siente como una tortura.

—¿Ya tienes hambre? —murmuro un rato después cuando empieza a revolverse, pero lo arrullo con la mayor calma posible— Tiene que dejar dormir a tu madre durante las noches, piccolo. 

Hace unos sonidos y aunque es casi imposible  podría casi jurar que me mira mal, lo que me hace soltar una silenciosa risa.

—Solo por ahora dejaré que tú tengas su atención —acepto— Pero más adelante exigiré toda la que me has robado.

Paso toda la noche con él, luego de varios videos de YouTube se podría decir que ya soy un experto en bebés, así que cuando ya amanece dejo todo tal cual y luego de despedirme de ambos salgo nuevamente por la ventana.

—¿Vas a alguna parte? —dicen de pronto y al darme la vuelta veo a Dimitri cruzado de brazos.

—Hola—digo con una sonrisa— Es un hermoso día, ¿verdad?

Aprieta la mandíbula con fuerza y me hace una seña para que avancemos, vamos a la cochera y luego de unos segundos habla.

—¿Quieres que te termine matando? —inquiere— Porque lo haría con gusto sin que me lo tengas que pedir dos veces.

—No me vio —aseguro.

Sin que me lo espere me lanza un puñetazo en la cara que me hace perder el equilibrio, me froto el lugar afectado y hago una leve mueca. Estoy tentando a devolverle el golpe pero por ahora decido contenerme un poco.

—Ella no es estúpida —espeta— Y yo tampoco.

—¿He dicho que lo seas?

—No, pero me estás subestimando —dice— Sé muy bien lo que estás intentando hacer con todo esto.

Atrévete a QuerermeWhere stories live. Discover now