Atrévete a Quererme

Extra

Estos sucesos ocurren bastante tiempo atrás, cuando Nico y Sky mantenían su "relación".

NICOLA:

—¡Déjame tranquila, maldito estupido!— grita Sky metiéndose en el baño.

—¿Qué hice ahora?— suspiro confundido.

Pasan varios minutos hasta que empiezo a escuchar sus sollozos al otro lado de la puerta, me acerco rápidamente y toco con fuerza.

—¿Duende? ¿Qué pasó?— sus sollozos paran por un segundo pero me ignora y vuelve a llorar— Voy a echar abajo la jodida puerta. Abre ahora mismo.

—¡Vete y déjame tranquila te dije! ¡Te odio! ¡A ti y a todos los malditos hombres de este mundo!— grita furiosa y después vuelve a llorar.

Abro la boca sorprendido por su grito, ella nunca está tan enojada y ni siquiera sé la razón de su odio hacia mi y toda la población masculina. 

Decido ser sabio y llamar a la única persona que tal vez ya haya convivido con los dramas de una mujer loca.

—¿Qué quieres?— contestó Malik.

—Necesito ayuda.

—¿Nicola?— pregunta confundido— ¿Nicola me está pidiendo ayuda? De verdad el mundo se tiene que estar acabando.

—No estoy para tus bromitas, idiota.

—Entonces llama a otro, imbécil.

—Skyler está teniendo un episodio de locura— interrumpo.

—¿Y? Solucionalo, es tu novia no la mía.

—No es mi novia, es mi... amiga.

—Si claro— se burla— Pero me da igual, es tu problema no el mío, ve como solucionarlo.

—No sé como— gruño— Ha estado gritando y llorando en el baño como por media hora. Temo que si entro me tire el secador o en realidad cualquier mierda a la cara.

—Tal vez tiene la menstruación— dice tranquilo.

—¿Eso las pone medio locas?

—¿Recuerdas cuando Kayra me echó de la casa hace unos meses?

—Ajá.

—Bueno estaba con la regla y se enojó porque no había helado— ríe— Me acusó de ser el peor novio del mundo y luego me sacó de casa.

—En qué mierda me metí — susurro incrédulo 

—Solo ten a mano mucho chocolate, helado o cualquier cosa que sea comestible. Corre, enserio, corre si no tienes nada.

Me estremezco de forma involuntaria y luego de que dice todo lo que debo saber cuelgo.

—Mierda— siseo cuando escucho que tiran cosas en el baño— ¡Skyler, sal ahora mismo hablo enserio!

Contra todo pronóstico la puerta se abre de repente y ella sale. Tiene el maquillaje corrido y pareciera que quiere matar a alguien.

—¡Tú!— gritó señalandome— ¡Vas a ir ahora mismo a la tienda y comprarás toallas sanitarias! ¿¡Entendido!?

—S-si— tartamudeo. Yo, Nicola Smirnov, intimidado por alguien que apenas me llega al hombro.

—¡Y también trae chocolate! ¡Mucho chocolate!

—Si, amor— digo aún un tanto aturdido.

Había estado con la regla otras veces pero nunca se había comportado como lo hace ahora. Solo espero no correr con la misma suerte de Malik.