Atrévete a Quererme

Capítulo 19

SKYLER:

Nicola aparece unos minutos después en la habitación mirándome con una gran sonrisa, nada comparado con la expresión que tenía hace solo un momento allá abajo. No se que ve en mi expresión pero se acerca a grandes zancadas para echarme un breve revision tomándome por las mejillas.

—¿Está todo bien, amor?

Mi prometido me está ocultando algo, pero si, todo esta bien.

—Si —miento, dándole una débil sonrisa— Es solo que estoy cansada por toda la acción del día de hoy, quiero comer y luego dormir un rato.

—Bien —asiente analizandome atentamente— Vamos a alimentarte entonces, mañana tenemos mucho por ver aún, así que tienes que descansar.

Decido seguirlo y fingir que no sé nada. Comemos un poco y luego ambos nos metemos a la cama, Nico me abraza con fuerza por la cintura y cae en un sueño profundo rápidamente, yo por otro lado apenas puedo conciliar el sueño.

El simple hecho de saber que me oculta algo me da un mal sabor, él prometió que no habría más secretos y está fallando a su palabra. Por otro lado, la razón más lógica que viene a mi cabeza es que se trata de algo relacionado con Niklas, aunque ¿de quién estaba hablando? ¿a quién tenía escondida y porqué? Mirando a Nicola dormido acaricio con suavidad su pecho.

—Por favor, no me rompas de nuevo —susurro, acercándome más a su lado.

A la mañana siguiente despierto sola en la enorme cama, un leve olor a humo me alerta y con rapidez bajo las escaleras. No se ve fuego por ninguna parte pero una nube de humo sale de la cocina, me apresuro a ir y en seguida noto que todo proviene del horno, lo abro y saco con cuidado lo que sea que se haya carbonizado por completo. Tosiendo abro todas las ventanas justo cuando Nicola entra corriendo al lugar.

—¿Qué mierda? —dice mirando a todos lados confundido— Salí solo cinco minutos...

—¿Tú estabas cocinando? —inquiero.

—Te quería preparar el desayuno —gruñe, mirando con odio la cosa carbonizada que yace en el mesón— Solo salí a buscar unas malditas flores.

Ahí es cuando me doy cuenta de que en sus manos sostiene un desaliñado ramo de flores silvestres.

Tranquilo corazón, no queremos morir antes de nuestra boda.

—Perdón —dice acercándose— Solo quería sorprenderte con algo hecho por mi, pero la cagué.

—Nico...

—Esto es el karma —continua— Me pasa por haberme burlado tanto de Malik y su nulo don para la cocina.

—Nicola —lo interrumpo— Gracias.

—Pero no hice nada —me mira con el ceño fruncido cruzándose de brazos.

—Pero lo intentaste —rebato—Nunca antes habías intentado cocinar, y el que lo hayas hecho por mí significa más de lo que crees.

Me mira fijamente por unos segundos y una sonrisa incrédula aparece en su rostro mientras niega levemente con la cabeza.

—No se que mierda habré hecho para que la vida me haya premiado contigo.

Siento como mis mejillas se calientan levemente y bajo la cabeza intentando ocultarlo pero él toma mi barbilla entre sus dedos y me hace mirarlo directamente a los ojos.

—Te amo, Skyler.

—Yo también te amo — susurro y luego armándome de valor decido arruinar por completo el momento— ¿Hay algo que me estés ocultando, Nico?