24

1.7K 79 47
                                    

Me estiro tanteando el colchón, pero no noto nada, levanto la cabeza rebuscando con la mirada, y no había ni rastro del chico. Froto mi cara levantándome de la cama y bajo al salón, Max seguía acostado en el sofá con unas gafas de sol y confeti encima, en el sofá contiguo estaba Pierre, sujetando una botella vacía de cerveza contra su pecho, y suponía que mi hermano seguiría en su dormitorio.

Agarro mi móvil mirando la hora, eran las once y media. Después de mandarle un mensaje a Carlos, me pongo a preparar el desayuno y recoger un poco tratando de mantener mi mente ocupada. Anoche hablamos sobre nuestra "relación", y no fue muy bien, pero no pensé que se iría sin decir nada el primer día del año.

Acababa de terminar de ordenar y preparar el desayuno, cuando mi hermano baja, pareciera que tiene un reloj para saber si ya está el desayuno listo. Despierta a Max y Pierre quienes se arrastran hasta la isla, dejándose caer en sus sitios con la cabeza entre las manos y ojeras.

-¿Y Carlos? -miro a mi hermano encogiéndome de hombros para dar un sorbo a mi café.

-Voy a pasar el día durmiendo -asegura Max, mordiendo un pedazo de bacon.

-Te acompaño -se incluye Pierre, agarrando una tostada.

Agarro la pastilla que me tiende mi hermano y me la tomo sin dudarlo, me abraza por los hombros pegándome a él.

-Voy a ir un rato con Charles, Arthur, Danny y Lorenzo -mi hermano se gira a verme con el ceño fruncido.

-¿Pasa algo?

Niego, notando la mirada azulada de nuestros otros dos amigos sobre nosotros.

-Solo necesito unas horas con ellos, estaremos para la cena familiar.

-Bien, porque si no, pienso acabarme tu trozo de pollo.

-Sigue soñando, hermanito.

Subo a darme una ducha y me cambio por algo cómodo antes de ir a ver a mis amigos a casa de Danny. Nada más abrir la puerta engancha sus brazos en mi cintura atrayéndome a su pecho en un abrazo.

-Danny -digo riendo, me suelta y entro, viendo a los hermanos ya sentados en el salón-. Leclerc's.

-Campeona -Lorenzo se levanta con una sonrisa besando mi mejilla.

-Hola Enzo -me siento junto a él tras saludar a los otros dos chicos.

-¿Quieres hablar o...? -miro a Charles y niego-. Bien, pues día para nosotros.

Preparamos pasta casera, pusimos películas, la chimenea, y por la tarde, cuando empezó a llover, decidimos salir a caminar bajo la lluvia. Era algo que me ayudaba siempre, además de que me gustaba y, solíamos hacerlo cuando alguien estaba triste en esta época. A no ser que estuviese nevando, ese era nuestro momento favorito del año.

Corremos bajo la lluvia, entre risas y murmullos hasta sentarnos en un banco con techado. Arthur me sienta sobre sus piernas, acariciando mi espalda y pelo mientras habla con sus hermanos. Cierro los ojos, Daniel estaba arrodillado frente a mí, con las manos sobre mis rodillas, notaba su mirada pero no quería mirarle. Porque sabía que si abría los ojos lloraría, y no quería hacerlo, no por él. Me sentía estúpida por haberle dejado entrar. Por haber caído aún cuando sabía que podría haber salido mal.

Supongo que entre los Norris, siempre habrá uno que vaya por delante, y esa no era yo.

-Está bien llorar -me asegura Daniel-. Pero no te pienses que no le voy a pegar.

-No lo harás, es... normal, estas cosas pasan -abro los ojos viendo a mi amigo-. Estoy bien.

-Siempre lo estás -se queja Lorenzo, haciendo que gire mi cara para verle-. Ese es el problema.

FEELINGS || CARLOS SAINZ Where stories live. Discover now