La oscuridad de Damon [+21] ✓

Capítulo 50

Damon Lombardi

Reunión en la organización.

Daryl aparece por la puerta con un mapa gigante de la montaña. En él se encuentran esas cabañas y los caminos que nos dirigen a ellas. Lo cuelga sobre una de las paredes en blanco, pegándolo con una cinta adhesiva que normalmente utilizamos para cerrarle la boca a la gente.

Darek está al lado de Jack, su mano derecha dentro de la mafia. Ambos dos miran a Daryl, quien pelea con el mapa para ponerlo bien recto y pegado a la pared. Finalmente, Gia va a echarle una mano, ayudándolo a colocarlo. Él se lo agradece con una encantadora sonrisa y vuelve a su sitio.

Daryl agarra un rotulador rojo, eliminando la cabaña que le pertenece a Roman Harris.

Anmon Darmolec. Adrianna Gates. Clint Darwin. Manolec Verned. Celia Patterson. Joe Blair.

Quedan seis cabañas restantes que faltan por investigar. Aunque no será necesario ir descartándolas una por una. Tras una noche pensando en ese papel con el nombre de todos los propietarios, leí el mensaje oculto que estaba en uno de los nombres.

—Antes de comenzar a hablar, os explicaremos brevemente lo que sucede —interviene Darek, tomando el control de su mafia. Se pone al lado del mapa y de Daryl, a quien le da un par de golpes en la espalda—. Denver Coleman ha secuestrado a una persona que necesitamos, el microchip que le ha puesto Gabby en el coche muestra que él se encuentra aquí, en la montaña.

—Lo jodido es saber dónde se encuentra —murmura Daryl—. Descartamos una de las cabañas, pero quedan otras seis.

Le arrebato el rotulador rojo a Daryl, tachando cada cabaña que se encuentra en el mapa, excepto una. La de Manolec Verned. Esa la rodeo, señalándola con un par de flechas. También se encuentra en un lugar alejado, pero cerca de una torre de vigilancia. Esa será una ventaja para nosotros.

—Es esa de ahí —les informo, retirándome hacia un lado.

Darek sonríe. Intuyo que él también ha llegado a esa conclusión al pensar un poco. Daryl es el único que no entiende nada, pensando por qué debe ser esa cabaña. La respuesta es más sencilla de lo que creíamos.

—Ordena las letras de Manolec Verned y te dará el nombre de Denver Coleman —le explico—. No fue tan difícil como pensábamos, tan solo estaba oculto.

—¿Y por qué hizo esto? ¿Querría que lo pilláramos? —pregunta, confuso.

Me encojo de hombros, sin saber qué respuesta darle.

—Tenemos el lugar concreto de la cabaña donde se encuentra nuestro objetivo, lo ideal es trazar un plan para interceptarlo, salvando a Myleen y sin matar a Denver. Es muy probable que haya más gente merodeando la zona, vigilando que nosotros no nos acerquemos —comenta Darek, empezando a caminar de un lado a otro—. Eliminaremos a cualquier persona que no sea Denver ni Myleen, sin excepciones. Cualquier encapuchado que vaya armado lo mataremos.