Capítulo 19

14.9K 1.1K 766
                                    

Damon Lombardi

Denver Coleman ha desaparecido. Admito que es algo que no me resulta extraño después de no habernos pagado al día siguiente de la ejecución. Ahora, se encuentra huyendo como una puta rata mientras nosotros nos quedamos sin el dinero prometido. Lo divertido del caso es que puso a su hija al mando en el club. Es tan estúpido que no le importa exponer así a su hija. Julie Coleman. Próximo objetivo a alcanzar.

¿Lo que quiero hacer yo? Matarla para darle su merecido a Denver. Cumplir lo que prometí aquel día en su club.

¿Lo que quieren hacer Darek y los demás? Esperar. Esperar a que ese gilipollas aparezca con nuestro puto dinero, así, por arte de magia.

Yo sé que eso último no va a suceder. Denver está huyendo de nosotros, tratando de conseguir un poco más de tiempo porque el plazo que le he dado, ha terminado el día de hoy. Como buena rata que es, en vez de enfrentar el problema, decidió irse. ¿A dónde? Es algo que no nos importa demasiado. No vamos a ir a buscarlo, vamos a conseguir que él vuelva aquí por su propio pie.

—Esperaremos hasta que él aparezca —dice Darek, informándonos a mí y a Daryl—. Si en una semana todavía no ha vuelto, actuaremos en contra de Julie, su hija.

—Me parece una gilipollez esperar tanto. Daryl y yo le hemos advertido el otro día lo que ocurriría si no nos pagaba el día de hoy. El plazo ha terminado y él ha huido, sin tener los huevos necesarios de descolgarnos el teléfono. ¿Qué vamos a hacer ahora? Ir a por su hija. No pienso esperar una puta semana para que Denver se salga con la suya.

—¿Qué ganas matando a Julie? —cuestiona Darek.

—¿Qué ganas esperando a matarla? —le pregunto, alzando una ceja.

—Que Denver vuelva con nuestro dinero. Si la matamos, él jamás nos pagará. Se hará la víctima, culpándonos de algo que tú decidiste hacer tan solo por no tener paciencia.

—Uy, perdón por no ser como tú, míster paciencia —contesto sarcástico.

Noto que su mandíbula se tensa, respirando por su nariz para no perder esa tan preciada paciencia suya. Forma un puño con ambas manos, manteniéndolas presionadas contra la mesa que tiene en frente.

—Tú cumples lo que prometes, ¿no es así? —le pregunto, logrando que él asienta a regañadientes—. Yo prometí matar a Julie como no nos pagara. Ha terminado el plazo de una semana. Así que, pienso hacerlo, Darek. Te guste, o no. Puedes dar órdenes sobre Daryl y Duncan, pero no sobre mí.

—Damon —murmura Daryl, para que me calle.

—Te lo vuelvo a repetir, Damon. No podemos hacer eso.

—No podéis hacer eso —le corrijo—. Yo sí puedo y es lo que pienso hacer. No matarla, pero sí ocasionarle un poco de daño.

—¿Secuestrarla?

—Es la única forma para que Denver vuelva y nos dé la cara.

—Y para que nos tome en serio —añade Daryl—. Si ve que no cumplimos nuestras advertencias, hará con nosotros lo que le dé la gana —me apoya él, por una vez en su vida—. La secuestramos y aplicaremos el método de tortura básico. Pero de eso ya os encargáis vosotros —nos señala.

Darek y yo, estamos de acuerdo en eso. Algo extraño, puesto que nunca nos ponemos de acuerdo en nada.

—Te tienes que encargar tú del secuestro —me dice Darek—. A mí y a Daryl nos puede reconocer, a ti, lo dudo. Lo ideal es que no se entere de nada, para no levantar sospechas entre los guardias del club o entre los clientes. Que sea como en la fuga de la prisión, algo calmado, que no se arme mucho escándalo.

La oscuridad de Damon [+21] ✓Where stories live. Discover now