My Time |Jeon Jungkook| Omegaverse

사십사 - Ante los Reyes

Pestañeó varias veces frente al espejo, había pasado mucho tiempo desde que usaba maquillaje y ropas bonitas. Sus dedos delinearon su propia mejilla con sentimientos confusos llenando su mente como niebla.

-Tu eres bonita aún con la cara limpia- dijo dulcemente su pareja quien no podía esconder lo encantado que estaba de ver a su amada.

-Ha pasado tanto... siento que soy la antigua yo...- murmuró nostálgica. Las piedras brillantes en su elegante vestido de color violeta no encajaban del todo en su estilo de vida. Jungkook le acarició las manos dándole confianza -No somos los niños de antes Youngnnie-.

Anhae era testigo del amor en la mirada de ambos jóvenes, dió lo mejor de sí la peinar el extenso cabello negro de la futura madre, su cabello siempre había sido sedoso, habían omegas que solían envidiarla, a pesar de que fue duramente criticada por su raza y estirpe, los habitantes del castillo sabían que era un diamante reluciente, era hermosa aunque no se diera cuenta, por eso las hembras le trataban mal, porque se suponía que debía ser inferior pero el Príncipe dedicó su adolescencia y juventud a destacar el tesoro que le acompañaba.

Al terminar de alistarse, la muchacha puso atención al traje que su Alfa lucía, impecable quedaba corto, la chaqueta blanca adornada del oro más codiciado no hacía justicia a su rostro y cabello encantador, en su mente retumbó la respuesta "Es el Príncipe de Oro después de todo".

El caballero le ofreció entrelazar los brazos, ella sintiéndose tímida aceptó, salieron de la habitación acompañados por la guardia del Príncipe. El mismo que podía sentir el corazón de Wooyoung agitado.

El camino al salón donde se encontrarían con los reyes fue inesperadamente corto, sentían que el tiempo pasaba rápido, en un abrir y cerrar de ojos estaban de pie en frente a la monstruosa puerta de Oro.

-Todo saldrá bien- le dijo a su querida novia afianzando su unión, ella tan solo pudo verlo a los ojos abatida por todas las emociones que estaba sintiendo, y en un acto de valentía entraron al salón.

¿Podía el aire cortarse en una habitación? Habían cuatro personas en esa habitación, además de una se estaba gestándose. Jungkook no la soltó en ningún segundo, a pesar de que enfrentaba su mirada con sus padres.

-Tomen asiento- recomendó el mayordomo principal de la corona. Wooyoung agradecía que su novio fuera tan fuerte porque pensaba que podría desmayarse en cualquier instante, se sentaron juntos en la otra punta de la mesa, sin saber qué decir en concreto. La reina mantenía su seriedad analizando cada uno de sus movimientos con los labios fruncidos, entonces su esposo comenzó a hablar.

-¿Cuándo pensabas que era un buen momento para decirnos?-.

Jungkook no retiró su mirada, como si su estatus no se lo permitiera, la sub omega se sorprendió, no recordaba que su pareja demostrara ser más fuerte que otros, menos ante el Rey.

-No mentiré, no tenía pensado decirlo en mucho tiempo-.

La Reina se mostró indignada -¿A qué te refieres?-. Recibió respuesta inmediata -No iba a decir que esperamos a un bebé antes de asegurarles una vida digna-.

-¡¿Y no pensaste que teníamos derecho a saber?!- exigió alterada -¡Ese bebé es un príncipe!-.

-¡Antes que un príncipe es nuestro hijo!- contestó con firmeza -Si Wooyoung no podía volver no la iba a obligar, menos a nuestro futuro bebé, sus vidas siguen corriendo riesgos, no podemos confiar en nadie-.

-¿Ni siquiera nosotros?- Era la primera vez que veía a la Reina llorar, la pelinegra sintió mucha angustia, ella no sabe las cosas por las que han tenido que pasar, debe sentirse herida, y jungkook no estaba siendo condescendiente.