My Time |Jeon Jungkook| Omegaverse

삼십칠 - Nido

Canela, manzana y caramelo... aquellos dulces olores eran ampliamente sentidos de forma atrayente, cálida pero a la vez sentía frío, mareada y adolorida, poco a poco cobraba conciencia siendo incapaz de abrir por completo los ojos.

-Tranquila Niña, estás a salvo-.

Trató de modular un ¿dónde estoy? Más era un reto físico. Logró percibir una mano en su frente -Sigue durmiendo, haz tenido una gran caída-. Sin las suficientes fuerzas para continuar  despierta volvió a cerrar los ojos.

La anciana observó a su aprendiz, una joven de 17 años proveniente de un reino vecino, -Debes vigilarla, probablemente le suba la fiebre-.

La chiquilla asintió -¿Qué hará con ella? Probablemente necesita un médico, sangró bastante, solo traerla a casa fue un reto-.

-Calla ya, le hemos dado primeros auxilios, aunque eso no es lo que más me preocupa ahora- la anciana observó a la sub omega -El principito debe estar en camino-. Volvió a ordenar.

-Cambia los paños de su frente, si vez que comienza a sangrar nuevamente cambia los vendajes- arrastró su bastón al pasillo -Y no me vayas a molestar con tus berrinches-.

La menor infló las mejillas indignada -Bruja-.

-¡Es lo que soy!- rió tetricamente mientras se dirigía a sus aposentos.

~•~

El clima había empeorado, una fuerte tormenta azotaba no solo el Reino sí no que también sus alrededores, pero ni el aluvión del antiguo testamento sería capaz de detener al Príncipe Jungkook.

Sus nudillos no alcanzaron a acariciar la madera siquiera cuando se abrió de par en par. El Alfa de Oro, Seokjin, Taehyung y Jimin miraron ansiosos el interior de la casa, divisando al fondo a la dueña.

-¡Haz tardado Principito!-.

Él comprendió el mensaje inmediatamente, apretó los labios en un intento de no demostrar angustia-Porfavor... dígame que está aquí-. La tensión era tanta que nadie emitía ni un solo ruido. La mujer asintió con lentitud -Te llevaré con ella, pero antes...- levantó su bastón -Quitense la ropa-.

Jimin bastante confundido pestañeó varias veces -¿Qué?-.

-No van a entrar a mi casa llenos de barro- indicó con el bastón algunas prendas sobre una mesa. Jungkook no realizó alegato alguno; lo más rápido que pudo se despojó de sus ropas reales, sus amigos a regañadientes realizaron la humillante acción de cambiarse prendas frente a una vieja desconocida y rara.

La dueña de casa con un gesto llamó la atención del Alfa más fuerte, le acompañó hasta la puerta de la habitación dónde su amada descansaba junto a una chica a la cual no conocía.

-Yougnnie- sus ojos se volvieron llorosos, hizo el amago de acercarse pero la bruja le detuvo.

-Antes de que se ponga romántico Principito, es importante que me escuche- le prestaron atención preocupados.

-He visto en las hojas de té que algo se encontraba escondido entre la hierba de las montañas, mi aprendiz dió con la sub omega malherida bajo un risco, tiene una herida en la cabeza bastante importante- apuntó a Seokjin -Príncipe médico deberías revisarla más tarde-.

-Tengo nombre señora- masculló molesto.

Sin prestarle atención volvió a pronunciarse -Ah, también debes examinarla-.

-¿Tiene más heridas?- preguntó el novio.

-Heridas no pero tiene un problema en crecimiento- rió fuerte -Aunque el problema que le aqueja también tiene de su parte majestad-.

Seokjin inmediatamente pasó por el lado de su casi hermano, revisó cuidadosamente a Wooyoung comprobando sus sospechas -No me jodas-.

-¿Qué tiene?- cuestionó con angustia -¿Crees que tenga secuelas?-.

-Claro que tiene secuelas- se corrigió -Más bien, tiene una secuela... de ti-.

Jimin y Taehyung se miraron incrédulos sincronizadamente  al comprender entre líneas.

Jungkook miró a todos sus amigos con extrañeza más recibió un bastonazo sin previo aviso -Quieres ser Rey pero no pescas ni un resfriado Principito, ¡está en cinta!-.

Sus ojos se abrieron sin poder creer lo que escuchaba, buscó en la mirada de Seokjin la confirmación de las palabras de la bruja.

-Es algo apresurado sin hacerle el examen correspondiente, pero, puede que tenga unos tres o cuatro meses- suspiró para nada contento -Kook-ah, ¿La anudaste? Te dije millones de veces lo peligroso que podría ser, su vida corría riesgo...- la anciana le interrumpió.

-¡Pero ya lo hizo! ¡Imagina las caras del concejo al saber que el Príncipe perfecto espera a su propio hijo del vientre de una "desdichada" ¡Será una locura!-.

Jin rebatió -¿Recuerdas haberla anudado?-.

El muchacho sonrió aún cuando sus mejillas eran adornadas con lágrimas -El último día que estuve con ella... perdí la cabeza...-. Jimin tocó su hombro entregándole apoyó-No fue lo único que perdiste jajajaja-.

Taehyung arrugó el ceño -No hagas chistes de mal gusto-.

-Deberían dejarla descansar... ella ha estado acumulando almohadas y ropa de cama- murmuró la menor presente.

-Está anidando por supuesto, demos algo de privacidada
a los futuros padres- la bruja volvió a golpear al príncipe con su bastón -No quiero guarradas, ya es suficiente con un bebé en camino-. Pronto la habitación solo  aguardaba al príncipe de petran y a una ex sirvienta durmiendo en la extensa cama.

Jungkook poco a poco se acurrucó junto a su querida pareja, se veía tan pálida y decaída, más relajó su fruncido ceño al contacto con la calidez de su cuerpo. Su mano temblorosa acarició el abdomen dónde podía percibir algo de la pancita en que el fruto de sus sentimientos crecía lentamente.

Wooyoung estaba inconsciente pero su rostro evidenció una tierna sonrisa ante el contacto que hechizó a su Alfa, el mismo que la lleno de mimos, besos y caricias, mientras lloraba con la ilusión de ser verdaderamente padre... con la persona que era dueña de su corazón.

Llevaba meses sin dormir con tanta calma y con el corazón lleno.

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Gracias por leer

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