Capítulo 121: Atribución

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El huevo cachorro que había sobrevivido en la destruida estrella Attia fue encontrado por la Alianza Estelar. Por supuesto, los miembros de la Alianza Estelar conocían la existencia de Ya Yi, pero para las fuerzas ajenas a la Alianza Estelar, mucha gente se llenó de asombro en ese momento al ver la aparición de este nox.

Resultó que todavía había alguien de la raza nox en el interestelar...

Sólo quedaba Ya Yi. Así que, técnicamente, si atendemos a la definición de 'raza', los nox ya no eran realmente una raza.

Como el último nox, Ya Yi era ahora sólo un individuo solitario.

Su ciudad natal y la gente de su raza ya no existían. Este nox no había podido volver a casa desde el momento en que nació y no tenía ningún lugar al que pertenecer.

La nave Arca atravesó fácilmente la línea de defensa del ejército de la Alianza Estelar porque las dos partes estaban manteniendo una videoconferencia. Xie Luan estaba negociando con el personal de la Alianza Estelar a través de Zarad.

"¡Es el general, es realmente el general Zarad—!" No sabían qué voz emocionada del soldado de la Alianza Estelar estaban escuchando. Al ver a la persona que aparecía en la imagen holográfica, la baja moral original del ejército de la Alianza Estelar se recuperó de repente en gran medida. Y un cierto brillo se reavivó en los ojos de los soldados.

Zarad, el antiguo comandante supremo del ejército de la Alianza.

No sólo muchos forasteros lo consideraban un general con destacadas hazañas militares, sino que para los soldados del ejército de la Alianza Estelar, su existencia siempre había sido la de un líder espiritual.

Aunque en el campo de batalla se conspiraba contra él y ya no podía utilizar sus habilidades, por lo que optó por presentar voluntariamente una solicitud de jubilación a los altos mandos de la Alianza Estelar. Pero aún así, en los años transcurridos desde que Zarad había abandonado el ejército de la Alianza Estelar, su estatus de líder espiritual del ejército nunca había cambiado.

Tras confirmar que su identificación era correcta, algunos soldados presentes llegaron a temblar de emoción.

"Con el general Zarad, debemos ser capaces de ganar esta guerra." Tal creencia era necesaria en este momento, y los soldados estaban dispuestos a creer en ella.

El ejército liderado por Zarad no había sufrido ni una sola derrota, lo cual era la fuente de la confianza de los soldados de la Alianza Estelar.

La moral de los soldados estaba visiblemente reforzada, lo que podía apreciarse a simple vista. Estos soldados parecían haber recuperado en un instante su confianza para derrotar al enemigo. La Alianza Estelar no podía dejar de entender el significado de esto.

La lucha en el frente era extremadamente feroz. Los soldados que luchaban en la primera línea hacían todo lo posible para interceptar temporalmente al enemigo fuera del planeta, pero era inevitable que siguieran llegando enemigos al planeta.

El objetivo del enemigo era la sede de la Alianza Estelar en la ciudad central. Con el cuartel general de la Alianza Estelar como base, las tropas de tierra también hicieron todo lo posible para evitar que el enemigo se acercara a la ciudad.

Los ciudadanos de la Estrella Hilorin fueron llevados a la sala de seguridad levantada del suelo por el personal de la Alianza Estelar en el momento en que estalló la guerra. Ahora, no se veían peatones en las calles de la ciudad de la Estrella Hilorin.

La sala de seguridad era una infraestructura que básicamente tenían todos los planetas. Normalmente estaba oculta bajo tierra y sólo era activada por la dirección del planeta cuando se necesitaba.

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