Tanto por sin ataduras

Capítulo 1 Sexo, estrés y mentiras

Harry odiaba su vida, había decidido hacía mucho tiempo. O quizás era Dios quien lo odiaba. ¿Qué había hecho para merecer una vida tan horrible? ¡Desde el principio! ¿Por qué había tenido que salir su nombre de ese maldito cáliz de todos modos? Lo que sea que Dumbledore haya dicho sobre ser un campeón que traiga honor y gloria a sus escuelas y casas, Harry sintió que no era más que un dolor de cabeza.

Harry no había querido ser campeón antes. Atrajo suficientes problemas sin buscar problemas. Pero todos parecían pensar que era un adicto a la fama o algo así. Esto incluía a uno de sus mejores amigos, Ron, que actualmente no estaba hablando con él debido a todo este lío. Los Hufflepuff estaban enojados con él por robar su única oportunidad de gloria. Los Ravenclaw se habían puesto del lado de Hufflepuff sobre él. ¡Los Slytherin se estaban comportando bien como Slytherin! Harry estaba tan contento de haber convencido al Sombrero Seleccionador de no colocarlo en la Casa de las Serpientes, donde no pertenecía, si sus constantes comentarios eran algo por lo que pasar. Snape estaba siendo más horrible de lo habitual. ¡Y eso decía algo!

¡Nadie se dio cuenta de que no había pedido esto!

Los Gryffindors eran un héroe adorándolo, pensó con un escalofrío. Personalmente, prefería la reacción de Snape que la constante adoración del héroe. Había empezado a esconderse en la biblioteca de los Gryffindors y luego irse a la cama temprano para evitar esto. Solo Ginny, que de todos modos apenas hablaba con Harry, Neville, que solo hablaba de Herbología, y Hermione, que siempre tenía la nariz metida en un libro, lo trataban con decencia.

Ah, y ahora tenía que luchar contra un maldito dragón; un dragón mortal, enorme, masivo, que respiraba fuego, escamoso, con cuernos y que estaría tratando de matarlo. El pensamiento de Harry había tomado un tono ligeramente histérico. Pero vamos, ¿realmente lo culpaste? Y no es como si nadie pudiera escuchar sus pensamientos. ¡Hagrid le acababa de mostrar las cuatro bestias monstruosas con las que tenía que luchar!

Incluso Hagrid había admitido que Colacuerno húngaro era "un trabajo desagradable". Y viniendo de Hagrid, quien pensaba que Cerebrus eran criaturas adorables, una araña gigante era su mejor amiga, y un bebé dragón era su bebé, entonces eso estaba diciendo algo. Y conociendo la mala suerte de Harry, probablemente terminaría enfrentándose al Colacuerno. Honestamente, ¿no había evolucionado el Mundo Mágico desde la época romana? Con los esclavos elfos domésticos que fueron tratados legalmente tan mal como los Dursley lo trataron a él y esta competencia de gladiadores donde tres, cuatro esta vez, niños se enfrentaron entre sí.

En días pasados ​​la gente había muerto. Como probablemente lo haría; ¿Cómo podía un niño de catorce años derrotar a un dragón? El Niño Que Vivió que había sobrevivido a Voldemort más veces de las que a Harry le gustaba pensar, sobrevivió a Acromatula, un Cerebus, un Basilisco y Dementores. No importa la infancia abusiva de Harry. Pero ahora, cuando lo dejaban, iba a morir. Después de todas sus luchas y el Ministerio simplemente iba a dar un paso atrás y verlo morir frente a sus compañeros. Harry no podía pensar en ninguna forma posible de superar la Primera Prueba. Con suerte, Sirius tendría algunos consejos. Estaba depositando todas sus esperanzas en el convicto.

Fue entonces cuando Harry literalmente se topó con Lucius Malfoy. Se preguntó brevemente qué estaba haciendo el Señor Malfoy aquí considerando que ya no era gobernador de Hogwarts. Miró al aristócrata alto y rubio vestido de pies a cabeza con una túnica negra que sostenía su bastón que ocultaba su varita. Por lo general, cuando él y Malfoy padre se conocían, tenían una batalla de ingenio, pero él no estaba de humor para eso.