-Y si se hace daño por mi culpa- Esa podía ser la mayor objeción que tenía. El pensamiento de que alguien se hiciera daño por ella.

-Pues que se maté- Se encogió de hombros desinteresadamente -Tú no eres nadie para andar detrás de él cuidándolo como si fuera un niñito. Lo que necesita es atención psicológica, y déjame decirte que tú no eres experta en el ámbito.

-No sé...- Mina volvió a rodar los ojos ante las estúpidas dudas que se metía Sana en la cabeza.

-Mira, Eunwoo te hizo mucho más daño del que puedes recordar, ni siquiera se merece que te preocupes por él, y menos cuando también le está haciendo daño a la persona que AMAS- Hizo énfasis en aquella palabra para tratar de convencerla -Por qué eso es lo que no paras de decir, amas a Tzuyu con todas tus fuerzas, no sé cómo es que te preocupas más por la persona que le ha hecho daño durante años.

Sana asintió suavemente ante las palabras de su mejor amiga, tenía razón, y hasta cierto punto ella también lo sabía, pero el miedo que Eunwoo se había encargado de inculcarle la hacía desconfiar incluso de sí misma.

-Sabía que estaba haciendo las cosas mal- Estrelló su cabeza contra la mesa, mortificándose a sí misma por sus decisiones -Y ahora Tzuyu…

-Sí, probablemente te odie- Comentó desinteresadamente antes de robarle otra uva -Y no es por nada amiga pero, si te mereces que este molesta contigo.

Sana se llevó las manos a la cabeza al escuchar tanta sinceridad de parte de Mina, puede que lo estuviera haciendo para ayudarla pero también la estaba haciendo sentir mal. 

-Agradece que estoy aquí para hacerte entrar en razón amiguita- Se levantó y le dio una suave palmada en la espalda -Ahora, debes arreglar las cosas tu solita- Sonrió suavemente -Recuerda que si no lo haces, probablemente termines perdiendo a Tzuyu para siempre y ni tú, ni yo queremos eso.

Sana levantó su culpable rostro y asintió suavemente.

-Lo haré. Gracias.

-Para eso estamos las amigas- Le guiño un ojo antes de dejarla sola para qué pensará en lo que iba a hacer de ahora en adelante, pues ella ya había cumplido con su trabajo.

(…)

-Eunwoo, tenemos que hablar- Soltó aquella frase en cuanto puso un pie dentro de la habitación del chico.

A Sana no le había tomado demasiado tiempo tomar una decisión sobre lo que haría, lo que si realmente la estuvo deteniendo por unas horas fue el hecho de que seguía teniendo miedo. Y no por ella, estaba teniendo miedo por lo que le pudiera pasar a las personas a su alrededor después de cortar completamente la comunicación con Eunwoo, por eso espero casi hasta la noche para ir a visitarlo en el hospital.

-¿Otra vez?- Eunwoo levantó la mirada de su celular -Esa frase nunca es algo bueno- Sonrió de lado -¿Qué te pasó ahora?

-Quiero terminar con esto- Soltó de golpe mientras se detenía a un lado de la camilla del chico.

-¿Ah?

-Vamos a terminar con esto- Repitió con voz firme, haciendo énfasis en la extraña relación que tenían los dos -No dejaré que me sigas manipulando.

-Oh por favor, ¿Quién te metió ideas así en la cabeza? ¿Tzuyu?- Preguntó con un tono burlón.

-No puedo seguir así Eunwoo. Me estoy haciendo daño.

-Bien que puedes sufrir un poco, tú dolor no se compara con el mío- Se encogió de hombros, quitándola completamente la importancia que le estaba dando la japonesa al tema.

SOME BETTER •SATZU•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora