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-¿Con quién hablabas?- Tzuyu entró a la habitación justo cuando Sana colgó la llamada.

-Con Eunwoo- Respondió simplemente, viendo con una suave sonrisa como la taiwanesa se le acercaba con una bandeja en manos.

-¿Todo bien?- Preguntó suavemente al mismo tiempo que dejaba la bandeja sobre las piernas de la japonesa.

-Sí. Solo lo he citado para que hablemos en un rato, en una cafetería- Respondió con honestidad, sonriendo en grande cuando vió lo que la taiwanesa le había traído para desayunar.

-¿Estás segura?

-Sí- Respondió sin dudar.

-¿Quieres que vaya contigo?- Ladeó ligeramente la cabeza mientras veía a Sana comer tranquilamente.

-No hay necesidad.       

-¿Y si te hace algo?- Tzuyu lo dudaba, pero no estaba de más ser precavida cuando se trataba de su primo.

-No sería capaz si estamos enfrente de más personas- Y la respuesta de Sana le trajo más preguntas que respuestas, frunció suavemente el ceño y la miró atentamente.

-Esto no había querido preguntártelo porque pienso que es invasivo de mi parte, pero la curiosidad me puede más en este momento- Sana giró suavemente la cabeza para poder ver la expresión de preocupación que tenía la taiwanesa -¿Eunwoo te ha golpeado?

Y el cuerpo de la japonesa se tensó en respuesta, desvió rápidamente la mirada a su comida y empezó a moverla suavemente de un lado para otro.

-¿A qué viene esa pregunta tan rara?- Preguntó con nerviosismo, tratando por todos los medios de evadir la verdadera respuesta.

Por suerte Tzuyu conocía a las mujeres y sabía cuando estás no querían responder sus preguntas, por lo que desistió rápidamente del tema al ver a Sana tan nerviosa.

-Está bien. Lo entiendo- Dijo simplemente mientras se giraba a otro lado, mirando sus guitarras como si fueran la cosa más interesante del mundo.

-Tzuyu- La llamó Sana mientras dejaba la bandeja a un lado para poder tomar el brazo de la más alta y hacer que la mirará de nuevo.

-No estoy molesta- Negó con la cabeza -Entiendo que no quieras decirme nada, es tu vida- Sonrió suavemente mientras se acercaba y dejaba un rápido beso sobre la mejilla de la chica.

-Lo siento- Bajó la cabeza, sintiéndose un poco idiota por no haber respondido a la pregunta cómo se debía.

-Está bien-Volvió a quitarle importancia -Solo ten cuidado

-Lo tendré.

-Si las cosas se ponen feas no dudes en llamarme- Tzuyu se soltó suavemente del agarré de Sana, solo para subirse completamente a su cama, quedando detrás de la japonesa -Estaré allí lo más rápido posible- Miró la espalda de la chica con una suave sonrisa.

-¿Eres así con todas?- Sana la miró por sobre el hombro mientras volvía a tomar la bandeja y continuaba comiendo.

-Ya deberías saber que tú eres muy diferente para mí- Tzuyu sin poder contenerse más la abrazó por la espalda, escondiendo su rostro en el cuello de está. Sana soltó una pequeña risa mientras asentía. Ya lo tenía más que claro.

-Me gusta que seas así solo conmigo- Admitió con su rostro ligeramente sonrojado. Era la primera vez que le decía abiertamente a la taiwanesa como se sentía con respecto a sus comportamientos. No pudo evitar que una suave sonrisa apareciera en su rostro cuando sintió que los brazos que la aprisionaban, se apretaban un poco más sobre su cintura.

SOME BETTER •SATZU•Where stories live. Discover now