-Ahhh- Sana tiró su cabeza hacía atrás cuando la lengua de Tzuyu succionó suavemente su clítoris, pasando su lengua por aquel pequeño manojo de nervios que la volvía locas en segundos y que la hacía gemir con fuerza. Sus piernas hicieron el intentó de cerrarse debido al placer que estaba recibiendo, pero rápidamente las manos de Tzuyu las mantuvieron en su lugar. De hecho, guío una de sus piernas para que la colocará sobre el hombro de la más alta para así darles una mejor posición.

Sumisamente obedeció a lo que quería, sintiendo de inmediato como la boca de Tzuyu iba directamente a su entrada, dando pequeños toques en su vagina con la punta de su lengua haciendo que su espalda se encorvara aún más y que su boca empezará a soltar palabras inexistentes.

-Tzuyu- Gimió el nombre de la chica cuando sintió que la lengua de está la penetraba, sus piernas se tensaron con fuerza al sentir las profundas estocadas acompañadas con algunas succiones.

Todo esto rápidamente empezó a llevarla al borde, sus gemidos salían con regularidad de su boca mientras su cadera se movía al compas de los movimientos de la lengua de Tzuyu, avisándole de lo cerca que estaba de llegar.

Con unos toques de Tzuyu con sus dedos en el clítoris de la japonesa fue más que suficiente para que está soltará un fuerte gemido que retumbó por la solitaria casa. Sana sentía que sus piernas no la ayudarían a sostenerse por mucho tiempo más, por suerte tenía a la taiwanesa sujetándola con la suficiente fuerza para que no fuera a caerse, sentía aún la boca de Tzuyu besando sus muslos, limpiando todos los jugos que seguían saliendo de su centro.

Aspiró con fuerza cuando vio que Tzuyu se colocaba de pie, parándose frente a ella con una pequeña sonrisa en sus labios.

-Te ves muy bien diciendo mi nombre de esta manera- Se burló, ganándose una mirada de reproché de parte de Sana.

-¿Sabes que es injusto?- Preguntó con un pequeño puchero en sus labios.

-¿Qué? Lo hago bien- Se defendió mientras soltaba una pequeña risa, acercándose a los labios de Sana y dejando un rápido beso en este lugar.

-Pero solo tú estás disfrutando de verme tan indefensa.

-Oh vamos, ¿Quieres intentarlo?- Preguntó mientras alzaba ligeramente una ceja.

-¿Me dejarías?- Le devolvió la pregunta con emoción.

-Puede que ni siquiera me hayas tocado pero me es bastante excitante verte gimiendo mi nombre mientras te retuerces.

-¿Estás caliente ahora mismo?

-Hey, yo no…- Se quedó en silencio cuando Sana se abalanzó sobre ella, besándola profundamente, las manos de la japonesa sorpresivamente bajaron hasta el trasero de Tzuyu, dándole un fuerte apretón que logró sacarle un tímido gemido -Oye- Se quejó al sentir que los labios de la japonesa ahora iban directamente a su cuello mientras sus manos empezaban a sacarle la camisa. Soltó un pequeño suspiro cuando sintió una fuerte presión sobre su piel canela, seguramente dejándole una marca.

-Vamos a mi habitación- Murmuró antes de tomarla por un brazo y empezar a arrastrarla escaleras arriba, yendo a su habitación a toda velocidad, una vez dentro, casi que tiró a Tzuyu en su cama, colocándose encima de ella rápidamente.  

-¿Cómo decirlo? Me es bastante caliente verte tomando el control- Tzuyu sonrió suavemente cuando Sana empezó a besar de nuevo su cuello mientras sus manos iban directamente a quitarle su sostén. Cosa que consiguió rápidamente, aventó la prenda en cualquier lugar antes de llevar con hambre su boca hasta el seno derecho de la taiwanesa, paseando sus labios por alrededor del pezón antes de tomarlo entre su boca, succionándolo suavemente.

SOME BETTER •SATZU•Where stories live. Discover now