SOME BETTER •SATZU•

•24•

-¿Sabes Tzuyu?

-Ummm.

-Te quiero.

-¿En serio? Yo también te quiero mucho unnie.

Sana estaba dispuesta a seguir con sus acciones el tiempo que fuera necesario, pero tuvo que detener sus caricias de golpe cuando el celular que había dejado en la mesa de noche empezó a sonar, extendió una mano hasta poder tomarlo, sonriendo suavemente al ver que se trataba de Mina.

-Hey, ¿Qué pasa Minari?- Contestó con un tono que denotaba lo feliz y emocionada que se encontraba en esos momentos.

-Te oyes muy bien- Mina sonrió suavemente al escuchar el tono de voz de su mejor amiga -¿Arreglaste las cosas con Tzuyu?- Y esa era la única cosa que llegaba a su mente al escuchar a Sana tan feliz.

-Algo así- Respondió sin perder su emoción -En realidad tengo muchas cosas que contarte- Miró de nuevo a Tzuyu y al ver que está, estaba durmiendo tranquilamente se levantó de la cama para poder hablar sin molestarla.

Caminó hasta la cocina. Ignorando completamente como Tzuyu nuevamente empezaba a moverse de un lado para el otro mientras su rostro se contraía. Con las ganas de llorar haciéndose presentes como un rayo.

-Unnie, ya estoy aquí, ¿Para qué me necesitabas de manera tan urgente? Me asusté cuando me llamaste de la nada, ¿Te pasó algo?

-He ganado.

-¿Ganado? ¿De qué hablas?

-Gracias por complacerme en todo lo que te pedía, fea. Fue realmente gratificante tener cosas sin necesidad de gastar un solo peso.

-¿Eh?

-El juego se acabó, y yo gané, debo admitir que me costó bastante tener que acostumbrarme a andar con alguien como tú, por suerte tú eres la única idiota que se creyó que realmente quería salir contigo porque quería. Nunca me gustaste, de hecho me das asco, fue tan difícil actuar como si me agradarás.

-¿De que estás hablando?

-¿Todavía no lo entiendes?

-¿Eunwoo? ¿Qué haces aquí?

-Vine a acompañar a mi novia, y de paso quería verte cuando supieras que todo había sido un juego, por cierto, le daré un buen premio a mi princesa por el gran esfuerzo que debió poner de su parte para poder soportar estar a tu lado.

-¿E-Es verdad Sana unnie? Todo lo que pasó entre nosotras…

-Fue condenadamente aburrido, y asqueroso, ya te dije que tuve que esforzarme mucho para parecer que me gustaba pasar tiempo contigo cuando en realidad lo único que estaba haciendo era aprovecharme de ti.

-N-No es verdad, unnie… Nosotras… Yo te…

-Aw, ¿Estás llorando? Déjame grabar este hermoso momento.

-Ahora chicos.

Una enorme cantidad de agua juntó a una buena cantidad de harina cayó sobre la cabeza de Tzuyu.

-Por favor, sonríe para la foto. Mañana estará en todas las páginas de la preparatoria.

La taiwanesa se tapó los oídos al escuchar las fuertes risas de todas las personas que estaban escondidas esperando el momento perfecto para salir de su escondite y burlarse de ella. Las lágrimas bajaban con intensidad por sus mejillas mientras su cabeza negaba suavemente ante la idea de que realmente estuviera quedando en ridículo frente a todos.