SOME BETTER •SATZU•

•23•

-Lo recuerdo- Y la japonesa no tuvo más opción que decirlo directamente, provocando que Tzuyu se detuviera de golpe a mitad de camino.

-¿De qué hablas?- Miró a la japonesa por sobre su hombro -Créeme que no soy la mejor escuchando, me dormiré si me cuentas tus problemas- Soltó con burla.

-Eres la misma chica con la que salí en la preparatoria solo porque Eunwoo me dijo que lo hiciera.

Y Sana nuevamente se recriminaba por la manera en que estaba diciendo las cosas, pero lastimosamente esa era la verdad.

-¿Solo?- Tzuyu quiso reírse por ese comentario, ¿Realmente había sido tan insignificante en ese tiempo? Eras aún más insignificante. Y su subconsciente le dio una respuesta obvia. Zhou Tzuyu era un cero a la izquierda en la preparatoria. Y ese solo hecho la hacía repudiar aún más el haber sido ese tipo de persona, odiaba tanto esa parte de ella con solo recordar por todo lo que había tenido que pasar.

-Ya deja de intentar ocultarlo- Pidió una vez más y cerró fuertemente sus puños cuando continúo hablando -Acabo de recordarte.

-¿Hasta ahora?- Tzuyu no pudo evitar que finalmente una sonrisa rota apareciera en su rostro ante la declaración de Sana. Patética vida de estudiante de preparatoria Zhou, estaba más que segura de que un perro era más importante para Sana que ella en ese entonces.

-Recuerdo la manera en que me miraste ese día- Admitió a la vez que el recuerdo llegaba a su mente una vez más -El día en que terminé contigo.

Y Tzuyu soltó una fuerte risa. Sinceramente no podía creerlo, pero era la verdad, aunque le doliera como el infierno, tenía que aceptarlo.

-¿Terminar?- Preguntó con un tono que perfectamente podía expresarse como dolor. Y eso fue todo, decidió ponerle fin a su actuación. Al demonio todo. Sabía que no tenía por donde escapar, y Sana estaba siendo lo suficientemente sincera como para darle el último empujón que necesitaba para finalmente sacar todo eso que la había estado persiguiendo en esos años por culpa de la japonesa y su primo -No fui nada más que un juego para ti Sana- Se dio la vuelta muy lentamente para encarar a la mayor, quién aún se encontraba sentada en el sofá, mirándola con los ojos llorosos, pero ella no podía sentirse mal por la japonesa ahora, no, se tenía que sentir muy mal por ella misma -No me veías como una persona, ni siquiera podía decir que era mascota para ti- Sus puños se cerraron con fuerza al recordar las humillaciones por las que tuvo que pasar -Siempre fui la chica nerd, fea, y molesta que no te dejaba en paz, ¿No es así?- Las comisuras de sus labios de elevaron ligeramente -Creo que hubiera sido mejor que salieras conmigo por pena, no que salieras conmigo porque Eunwoo te lo pidió.

Y Sana había conseguido lo que quería, así que ahora era su turno de ser completamente sincera.

-Yo lo amaba- Admitió -Y por eso acepté hacer cualquier cosa que me pidiera- Se llevó las manos al rostro, quería llorar, pero sentía que sería muy egoísta de su parte cuando Tzuyu estaba tratando de mantenerse fuerte -Solo quería que él me aceptará, que me amará, quería que Eunwoo saliera conmigo a toda cosa.

-¿Y de que sirvió?- Preguntó con un tono que intentaba sonar burlón, aunque ahora mismo no se sentía con ganas de burlarse, ni siquiera de ella misma -¿Terminaste saliendo con él? Sí- Ladeó un poco la cabeza -Y de pasó te ganaste un par de traumas por su culpa, creó que eso último no estaba entre tus planes ¿Verdad?- Apretó un poco los puños -Pero, ¿Quién soy yo para hablar?- Se encogió de hombros -Solo fui el estúpido trampolín que usaste para cumplir tu meta.

-No debería decir esto- Sana sonrió tristemente, iba a ser muy sincera -Pero me alegro de que lo recordarás.

-¿Cómo se puede olvidar tal humillación por la que me hiciste pasar?- Sana asintió ante las palabras de Tzuyu, tenía bastante razón. La japonesa se levantó de su lugar y camino hasta quedar parada frente a la más alta.