El RATÓN MACHO, ENVÍA AZÚCAR EN SECRETO A SU ESPOSA [BL]

115. Es realmente dulce

Xie Yang  miró a Feng Dian de arriba abajo.

Feng Dian tenía buenos rasgos faciales, la estatura es  mediana y parecía relativamente joven. Entre sus rasgos faciales, sus ojos se  destacaban, parecían suaves y afectuosos, así que aunque pusiera una expresión de asco, no era ofensivo.

Era fácil para él pretender ser guapo y gentil.

Xie Yang de repente sintió que las  cejas y ojos de Feng Qinglin se parecían mucho a  Qiu Xing. Esto era mas agradable a sus ojos.

Feng Dian frunció el ceño y preguntó fríamente: —¿Qué estás mirando?

Qiu Xing se había detenido justo después de Xie Yang. Estaba a punto de mirar de reojo a Feng Dian, pero Xie Yang levantó una mano hacia su cara y no le permitió girar.

La mirada de Xie Yang seguía en Feng Dian, pero las palabras eran para  Qiu Xing y su voz no era baja: —Ah Xing, no gires la cabeza, hay  algo sucio por allí. Te dañará la vista.

Todos se quedaron atónitos.

¿Cómo llamaba este joven a Qiu Xing? ¿Ah Xing? ¿Acaba de decir la palabra sucio?

La frialdad en los ojos de Qiu Xing después de hacer una pausa se disipó. Sonrió y tomó la mano de Xie Yang mientras miraba ligeramente a Feng Dian: —Esta bien. Después de verlo durante tantos años, estoy acostumbrado.

—Puede que estés acostumbrado, pero no quiero que sigas sufriendo. —Xie Yang finalmente retiró su mirada—. Creo que es mejor que salgamos rápidamente. Siempre hay una basura que obviamente está sentada en el sofá de la casa de los padres de su esposa, pero se niega por completo a darle cara a los padres de su esposa. No sé si  la basura es  la que se arrepiente de haberse convertido en el hijo de la familia Tao y quiere dar la vuelta  para  ganar tu favor o si la familia Tao no te  da la bienvenida en esta fiesta de cumpleaños por lo que te  quieren echar cortésmente.

No era educado decir esto en absoluto. Maldecir a una persona, ponerle el sombrero de basura y claramente instigar la relación entre la familia Tao y Feng Dian.

El salón estaba completamente silencioso y las miradas de todos hacia Xie Yang cambiaron.

Pensaban que este joven sólo estaba abrazando  los muslos de Qiu Xing y vendía su aspecto. Sin embargo, resultó que era diferente de lo que todos pensaban.

Después de observar a Xie Yang, miraron a Feng Dian y contuvieron sus preocupaciones.

Todos los presentes formaban parte de la familia Tao o eran parientes. Aunque sabían que Feng Dian sólo quería apuñalar a Qiu Xing y no pretendía hundir la reputación de la familia Tao. Podían entenderlo racionalmente, pero era difícil para ellos aceptarlo emocionalmente.

Si no fueran señalados,  apenas se preocuparían por Feng Dian y solo pretenderian ser estúpidos. Sin embargo, ahora Xie Yang soltó estas palabras. Si pretendían ser estúpidos, ¿no era sólo dejar que Feng Dian pisara su reputación?

Muchas personas dirigieron su mirada al Anciano Tao y a Tao Huazhang. Como el patriarca más antiguo de la familia Tao y el líder actual de la familia Tao, sería inapropiado que el Anciano Tao y Tao Huazhang no hablaran en este momento.

Xie Yang señaló que Feng Dian era un desvergonzado y fue despreciado por todos.

Al mismo tiempo Feng Dian, se dio cuenta de que no debería haber dicho esas palabras justo ahora. Su corazón estaba molesto y preocupado. Sólo quería decir algo para salvarse cuando el Anciano Tao recuperó su fuerza y abrió la boca.

La voz del anciano era muy fría cuando ordenaba: —Huazhang, los asientos están a punto de abrirse. Lleva a los invitados a sentarse primero. Feng Dian, ven, tengo unas palabras que decirte. Lan Lan, sal a ver por qué no ha vuelto tu tía. Por cierto, ayúdame a preguntarle si ha venido a celebrar mi cumpleaños o a traer a su inútil hijo a una cita a ciegas.