Capítulo 47: Misión Búnker (Parte Final)

25 6 0
                                    

Omnisciente.

Stalin ha caído y el jefe ha cogido al niño.

Stalin ruge mostrando sus ojos celestes y sus últimas fuerzas, desde lejos escucha lobos aullando y cierra sus ojos mientras sonríe.

Todos buscan el origen de aquel aullido, desde lejos se ve una mancha negra y blanca, reflejado por el sol.

— No pueden ser ellos. No tiene lógica— comenta el jefe y los Alfas se asombran. El jefe tira al chico en el suelo.

Hay seis lobos en una colina, cuatro lobos de tono rojizo siguiendo a un lobo blanco pequeño y uno negro de gran tamaño.

— La manada de lobos— comenta uno de los Alfas sin poder moverse.

Los lobos se acercan a la batalla y protegen a Stalin y a los demás. El lobo blanco lame la cara de Stalin intentando que reaccione, Stalin mueve los dedos de su mano, y consigue abrir un ojo para darse cuenta de que se trataba de Tyler y Black, el lobo de Mark Over.

— Jefe ¿Ese no es Black, el lobo de Mark Over?

— ¿Mark Over está relacionado con Stalin? Así que es verdad, Stalin participó con Mark Over en el Sharwen Coliseum.

Tyler tiene un tamaño común y ojos marrones.

— Tenemos que acabar con ellos, no podemos tocarnos con la familia que está en camino— comenta el Jefe.

Corren los seis en contra de los lobos, Tyler se transforma y aumenta su tamaño y sus ojos se vuelven de tono ámbar. Cada uno lucha con uno, Black se enfrenta con el jefe y los lobos rojos terminan con las patas rotas, pero Tyler los defiende de los otros Alfas, al sentir que uno está mal herido, se enfada y sus ojos se vuelven celestes.

— Seños, tiene que rugir y llamar a toda la manada, la familia llegará en cinco minutos, no podemos con Black y Tyler, no podemos llevarnos nosotros solos al chico.

El jefe se enfada, y se aleja de Black, comienza a golpear al suelo y ruge, sus ojos brillan tanto que se desmaya. Segundos más tarde comienza a temblar en suelo, una avalancha se dirige a donde se encuentra Tyler, un conjunto de manadas que superar las cien personas están enfrente de Tyler y Black, nuevamente tiembla el suelo, esta vez vienen detrás de ellos, Tyler y Black se ponen a la defensiva y protegen cada lado, no se darán por vencidos. Tyler se relaja al notar que los hermanos de Stalin son los que estaban detrás de él.

— Sharlet Memberry...— se escucha murmurar entre las manadas.

Sharlet aúlla y su familia se sigue. Stalin escucha esto y poco a poco sus heridas se curan y se pone de pie, lo mismo le pasa a los que le acompañaban y a los lobos.

— Mamá— dice Stalin. —Papá, Tom, Zend, Sean y Been, habéis venido todos— Zend abraza con fuerza a Stalin.

— No te olvides de nosotros— comenta Ariel.

— Primo Ariel, Sylvia, tía Ingrid y tío Ander— Stalin se emociona al verlos.

— ¿Quién se ha quedado cuidando Sharwen?

— Sabía que te preocuparía eso— dice Sharlet. —Están tus amigos, todos cuidando hasta que lleguemos.

Se escuchan aplausos, al fondo de las manadas. Es el jefe.

— Que emotivo reencuentro, ha sido dura tu excursión ¿No? STALIN MEMBERRY— resalta su nombre mirando a Dennis.

— Es un honor haber trabajado mano a mano con un Memberry, fundador de nuestra aldea­— Dennis se arrodilla ante Stalin.

— ¿Como?— Stalin no entiende nada.

— Hicimos lo que dijiste, invertimos nuestro capital en ayudar a los demás— le dice Zend.

— Yo no dije

— Lo quería decir— le interrumpe Sean. — No sabíamos que te encontraríamos aquí, porque no sabías nada de esto.

— Bonita historia— interrumpe el jefe. — Me presento, me llamo Andrew Gold.

— No pude ser, conocí a tu hermano y padre en el torneo del Wild Force— dice Stalin.

— De ellos solo me interesa el apellido, no formo parte de su manada ni reglas, formamos este clan para quitarle el puesto de Alfa a mi papá, por el necesitamos al chico, para comenzar la guerra.

— También estás en contra de la manada Bloodline.

— De todos los de El Clan Blood, ellos me desterraron de sus territorios, pero volveré. Acabaré con la Manada Gold Blood y la Manada Bloodline y todo aquel que pertenezca a ese clan.

— Tendrás que matarme para llevarte al chico— casi lo hago, pero lo volveré a hacer.

— Una cosa— interrumpe Dennis. — El chico es valioso para ambos bandos, propongo moverlo y protegerlo de la batalla.

— De acuerdo, muévete tú solo, y llévalo a ese conjunto de sacos.

Dennis acepta y es el único que se mueve.

Apunto de que comience la batalla ambos bandos se organizan.

El equipo de Stalin se divide en tres parte, en el frente están los lobos junto a Tyler y Black, detrás de ellos, los de la aldea, con Stalin y Dennis dirigiéndolos, y por último la familia Memberry liderados por Ewaan y Sharlet.

El equipo de Andrew tiene dos frentes, los Betas de las manadas se intercalan por colores de ojos, uno ámbar seguido de celeste, detrás están los respectivos Alfas de las manadas, por último los Alfas de Andrew, y Andrew está solo al fondo de todo.

Ambos bandos se dividen y comienzan a atacar, la sangre están en el aire, todo aquel que combate tiene su ropa llena de sangre, poco a poco van cayendo de ambos bandos, solo quedan de pie, Tyler, Black, Stalin, Ewaan y Sharlet, además de Andrew y sus cinco Alfas.

— Ganamos en número y además estáis muy cansados— comenta Andrew.

Es verdad, Tyler y Black estaban cansados antes de comenzar a pelear, porque corrieron para llegar a Stalin, la familia Memberry también llegaron con prisas y los de la aldea pelearon en el búnker.

— Desde el principio teníais ventaja, aun así conseguimos igualarlo, no nos rendiremos.

Andrew y los demás Alfas se lanza a por ellos, Black y Tyler acaban derrotados y en el suelo, Stalin igual y los demás terminan con los Alfas, pero aún queda Andrew y un Alfa más.

— Otra vez has perdido Stalin— comenta Andrew caminando a por el chico.

— Si pierdo yo me daría igual— se levanta con sus ojos celestes. — Pero como te dije antes, tendrás que matarme para llevártelo.

Andrew ordena a su Alfa atacarlo, pero Stalin ha conseguido controlar el poder del sus ojos nuevos y le parte el cuello.

— Por fin he podido entender este nuevo poder. Y al controlarlo puedo aumentar mi poder a voluntad propia— corre hacia Andrew y le parte el cuello. — Es un poder difícil de controlar pero muy útil— coge al chico y lo lleva con su familia.

Ruge y todos se levantan.

— Si no queréis morir iros ahora mismo— ordena Stalin y como pueden se marchan llevando a Andrew entre varios.

El Alfa Divino: La Leyenda Del Hombre LoboTempat cerita menjadi hidup. Temukan sekarang